ASÍ ES COMO TU CAMA TE PUEDE ESTAR ENFERMANDO
Luego de un largo día, buscas meterte en la cama, te sientes seguro y cómodo, pero lo que hay en tu cama podría estarte enfermando.
Hay múltiples contaminantes- bacterias, hongos y alérgenos, que tú no puedes ver pero que según estudios allí se encuentran.
Cuando te mueves mientras duermes, los haces subir al aire y luego los respiras.
Esto es todo lo que hay en tu cama:
Excremento de ácaros del polvo: El excremento de los ácaros del polvo es altamente alergénico, dice el doctor William Berger, de la Academia Estadounidense de Alergia, Asma e Inmunología.
Inclusive si no eres alérgico al excremento de los ácaros, todavía pueden irritarte de la forma en la que lo haría la pimienta si te cae en la nariz y los ojos.
Solución: Retirar las alfombras y trapear los pisos.
Hongos: Investigaciones muestran que las camas tienen moho, hongos y bacterias, pequeños contaminantes del diámetro de uno de tus cabellos.
Los hongos por sí solos se subirán a tus hombros. Un estudio analizó 10 almohadas de uso regular y encontró que en su conjunto tenían 47 especies de hongos.
Solución: poner un purificador de aire junto a tu cama.
Litros de sudor: Piensa en esto, pasas un tercio de tu vida en la cama, por lo que vas a sudar en ella, 98 litros al año, de acuerdo con estudios.
Puedes tener estreptococos o estafilococos en tu piel y eso puede infectarte a ti o a tu pareja.
Solución: Lavar tu ropa de cama con agua caliente al menos una vez a la semana.
Desechos corporales de tu mascota: No importa cuánto ames a tu mascota, podrías ser alérgico a su caspa, su orina o su saliva.
Solución: Aspirar tu cama y tus almohadas al menos una vez a la semana. Inclusive si no tienes una mascota, aspirar es bueno para deshacerte de otros contaminantes.
Fuente: CNN.