MUERTE Y DESTRUCCIÓN POR LLUVIAS EN HONDURAS
Un total de ocho personas han muerto, una está desaparecida y más de 300 familias están damnificadas en Honduras debido a las lluvias que afectan al país desde la semana pasada y que han causado deslizamientos de tierra e inundaciones, informaron hoy fuentes oficiales y de socorro.
Las precipitaciones provocaron en las últimas horas la muerte de Luis Daniel Zelaya, de 21 años, un militar asignado al noveno Batallón de Infantería, ubicado en municipio de Trojes, en el departamento oriental de El Paraíso, según un informe de los bomberos.
Zelaya fue arrastrado el domingo por una corriente de agua en Trojes y su cuerpo fue recuperado horas después por los bomberos, añadió.
Otro hombre, identificado como Miguel Medina Cruz, está desaparecido desde el sábado, al parecer, luego de ser arrastrado por una corriente de agua en el río Jalán, en Danlí, según las autoridades hondureñas.
La estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) de Honduras había reportado hasta el domingo siete víctimas, cinco de ellas murieron soterradas el viernes por la noche debido a un derrumbe en la comunidad de El Junco, en el departamento central de Comayagua.
Las otras dos víctimas murieron ahogados el sábado en el sector de Danlí, El Paraíso, según el organismo de protección civil.
Más de 300 familias de municipios aledaños al río Ulúa en los departamentos de Cortés, Yoro y Atlántida, en el norte del país, están damnificadas, según la Copeco, que mantiene desde el sábado la "alerta roja", que implica evacuación, en esas regiones.
La Copeco indicó en un mensaje en su cuenta de la red Twitter que ha empezado a enviar ayuda humanitaria a los afectados por las inundaciones.
La Oficina de Pronósticos de Aeronáutica Civil en la capital hondureña indicó que el mal tiempo con lluvias continuará en el país centroamericano al menos hasta el martes, debido a dos fenómenos en el Caribe y uno en el Pacífico.
A causa de las lluvias, al menos siete departamentos del sur, centro y norte están en alertas preventivas por la crecida de ríos y quebradas.
EFE