Descartaron la presencia de coronavirus en el crucero en Italia
El resultado definitivo de los análisis realizados a una mujer originaria de Macao, China, que se encuentra a bordo del crucero Costa Smeralda, bloqueado el jueves en el puerto italiano de Civitavecchia y procedente de Palma, han dado negativo en coronavirus, confirmaron los médicos italianos responsables de los exámenes.
La mujer de Macao, región autónoma de la costa sur de China, presentaba fiebre y problemas respiratorios, y había sido aislada junto con su marido en el hospital del barco, en el que viajaban otras 7.000 personas. La mujer y su marido habían embarcado en el puerto de Savona, en Génova, después de llegar al aeropuerto de Malpensa, en Milán, el pasado 25 de enero, según las informaciones locales.
“Después de llevar a cabo todos los análisis siguiendo los protocolos operativos en dos pasajeros del barco atracado en el puerto de Civitavecchia, el resultado es negativo”, informó el hospital Spallanzani de Roma en un comunicado.
Hasta la embarcación se trasladó un equipo de ese hospital de la ciudad de Roma, que realizó las pruebas a la mujer y después las analizó en el centro para obtener un resultado en pocas horas.
“El ministerio de Salud nos alertó de posibles casos y envió tres médicos a bordo para realizar los exámenes”, informó más temprano a la AFP una vocera del centro de salud de Civitavecchia.
La empresa italiana Costa Cruceros, a cargo del viaje, confirmó que había 6.000 pasajeros a bordo y el resto eran miembros de la tripulación. La firma de cruceros explicó que “activó el protocolo para un caso sospechoso relacionado con un huésped de Macao actualmente a bordo de Costa Smeralda”, según el comunicado.
“La mujer, de 54 años, fue puesta en una cuarto aislado de la enfermería de a bordo junto con su compañero de viaje. Es nuestra máxima prioridad garantizar la salud y la seguridad de los pasajeros y la tripulación”, añadió.
La pareja en observación voló a Milán desde Hong Kong el 25 de enero, antes de subir al crucero, y embarcó en Génova, según informan medios italianos.
Dentro de la nave se vive una situación de “total normalidad” y los turistas esperan y charlan entre ellos en el recibidor y en los pasillos, explicó más temprano por teléfono uno de los viajeros que se encuentran a bordo, Filippo Rossi, acompañado por su familia.
“Por supuesto estamos un poco preocupados. Nadie sube ni baja del barco con excepción de los médicos. Estas vacaciones corren el riesgo de terminar por ser una pesadilla”, comentó sobre las horas que estuvieron varados uno de los pasajeros.