Ex presos políticos denuncian violación a los derechos humanos en Nicaragua ante la ONU
Ex presos políticos nicaragüenses denunciaron durante la Asamblea del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas las constantes violaciones a los derechos humanos que se viven en Nicaragua perpetrados por el régimen de Daniel Ortega.
En un foro que contó con la participación de la periodista Lucía Pineda, Edwin Carcache, Victoria Obando, todos expresos políticos, el relator especial de la ONU para la libertad de asociación Laurent Voule y el comisionado de la Comisión Interamerica de Derechos Humanos (CIDH) Joel Hernández, se discutió la crisis que vive el país.
La periodista Lucía Pineda denunció las violaciones a la libertad de prensa, explicó que según la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, en Nicaragua se han registrado 1,300 violaciones a la libertad de expresión, entre ellas el asesinato del periodista Ángel Gahona, 5 encarcelamientos de periodistas y 90 comunicadores exiliados.
Mientras Edwin Carcache y Victoria Obando denunciaron los niveles de violencia y represión estatal perpetrados por la policía sandinista, la criminalización del derecho a la protesta y la intimidación de todas las instituciones del Estado, Policía, Poder Judicial, Ministerio Público, Instituto de Medicina Legal y Poder Legislativo.
Joel Hernández de la CIDH aseguró que, “En Nicaragua existe una tendencia, entre comillas, de regresar a la normalidad, pareciera que esta negación del Estado a reconocer la crisis, la imagen que se quiere transmitir es que la crisis fue superada, a través de leyes muy cuestionadas”, explicó.
Hernández llamó al gobierno a mostrar voluntad y apertura para aceptar la colaboración ofrecida por la comunidad internacional para buscar una salida pacifica a la crisis que vive el país. “si Nicaragua tiene voluntad de avanzar en esta crisis, una primera acción seria responder a la comunidad internacional, al relator especial para visistar Nicaragua. El silencio de Nicaragua ante estas repetidas solicitudes es simplemente desolador porque hace ver que no existe voluntad de aceptar la cooperación internacional”.