Representante de la sociedad civil mexicana denuncia en OEA persecución religiosa en Nicaragua

El mexicano Rodrigo Iván Cortez habló en el diálogo entre la Organización de Estados Americanos (OEA) y la sociedad civil, en presentación de la Coalición por la Libertad de Conciencia y Expresión, y en su discurso expuso la persecución de la dictadura de Daniel Ortega a la iglesia católica y pidió una posición enérgica por parte del dicho organismo.

 “El horizonte de libertades en América Latina se ve restringido gravemente en países como Cuba y Venezuela, y más recientemente en México y Nicaragua”, señaló.

“Denunciamos ante esta asamblea que el llamado discurso de odio se está utilizando para cancelar el discurso que odian quienes detentan el poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial en México, dónde se cancela la libertad de prensa, impidiendo la libre manifestación de ideas y amenazando incluso con cárcel a periodistas, como Sergio Zaragoza, director de México elige, por disentir con funcionarios del régimen en temas como la protección de la vida”, expuso.

Cortez denunció que en Nicaragua “se está llevando a cabo una sistemática violación del derecho a la libertad religiosa contra la iglesia católica, donde sus ministros de culto han sido encarcelados y condenados bajo acusaciones tan falsas como absurdas, como es el caso del obispo Rolando Álvarez, que clama al cielo”.

Lea más: Brasil dice que buscan "texto interesante para todos" en resolución de Nicaragua

Asimismo, dijo que se han expulsado órdenes religiosas como la de la madre Teresa de Calcuta, “se han cerrado sus medios de comunicación (de la iglesia), clausurados sus instituciones educativas, se prohíben manifestaciones públicas de fe, como las procesiones de Semana Santa”.

Además, dijo que la protección de las libertades garantizadas por el pacto de San José es esencial para la democracia y que la OEA debe declarar enérgicamente en estas acciones de Nicaragua y de México.

Violaciones en México

Cortez también dijo que en México se cancela la libertad de expresión y la inmunidad parlamentaria de la oposición, como en los casos del diputado Gabriel y la diputada Teresa Castel, por tratar de defender a los menores de edad y a las mujeres.

“Leyes que están para defender mujeres están siendo reinterpretadas por tribunales para justificar la violencia contra ellas, se cancela la libertad de expresión de los ciudadanos en la conformación democrática de las leyes, esto lamentablemente lo sufro en carne propia en los casos que se están llevando a cabo en contra de mi persona y la organización que presido, el Frente Nacional por la Familia, por rechazar iniciativas ostensiblemente violatorias de derechos humanos promovidas por políticos del régimen”, apuntó.

Además, considera que en México se quiere convertir los llamados derechos sexuales y reproductivos en una imposición coercitiva del aborto y la ideología de la confusión de género cancelando las libertades fundamentales y resquebrajando la de