Actividad económica de Nicaragua subió al 13,2 % en noviembre pasado
El Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) en Nicaragua subió un 13,2 % en noviembre pasado con relación al mismo mes de un año antes, según un informe divulgado este sábado por el Banco Central nicaragüense (BCN).
El IMAE de Nicaragua mostró un crecimiento de 13,2 % con relación a noviembre de 2020, de 10 % en la variación acumulada enero-noviembre de 2021, y de 9,1 % en promedio anual (diciembre de 2020 a noviembre de 2021), detalló el banco emisor del Estado.
"La actividad económica continuó mostrando la tendencia positiva observada desde inicio de año, con crecimientos en todos los sectores", destacó el BCN.
Las actividades con mayor crecimiento fueron explotación de minas y canteras (65,1 %); construcción (36,3 %); energía y agua (23,4 %); pesca y acuicultura (20,6 %); industria manufacturera (19,6 %); hoteles y restaurantes (19,1 %); y comercio (18,5 %), según los datos oficiales.
Por otra parte, se observaron disminuciones en las actividades de intermediación financiera y servicios conexos (-4,4 %); y otros servicios (-0,3 %).
El IMAE es un indicador que mide los 17 principales sectores de la actividad económica de un país y es utilizado para la toma de decisiones de inversión.
Nicaragua espera un crecimiento del producto interno bruto (PIB) de entre un 7,5 % y un 9,5 % en 2021, con una inflación acumulada de entre el 6 % y el 7 %, según el Banco Central.
Para el 2022, la autoridad monetaria estima un crecimiento económico de entre 3,5 % y un 4,5 %, y una inflación de entre 2,5 % y un 3,5 %.
La economía nicaragüense se ha contraído los últimos tres años en un promedio de -3,03 % anual.
Lea también: Doña Coquito se encuentra en estado delicado de salud
El PIB decreció un 2,0 % en 2020 como producto de la pandemia de la covid-19 y los daños causados por los huracanes Eta e Iota, en noviembre de 2020, según el Banco Central.
En 2019 cayó un 3,7 % y un 3,4 % en 2018, como producto de la crisis sociopolítica que afecta al país desde hace 45 meses, según la autoridad monetaria.