Arrestan por homicidio al joven que mató a un sintecho en el metro de Nueva York
El joven exmilitar que este mes mató a un hombre sin hogar en el metro de Nueva York, un caso que ha causado una fuerte polémica en la ciudad, se entregó este viernes a las autoridades tras ser finalmente acusado de homicidio imprudente.
Daniel Penny, de 24 años, llegó a primera hora de la mañana a una comisaria de Policía de Manhattan para ser arrestado y se espera que hoy mismo comparezca ante un juez, según medios locales.
El pasado 1 de mayo el joven se enfrentó con Jordan Neely, un hombre de 30 años que, según testigos, había estado gritando a los pasajeros de un vagón de metro, lo tumbó al suelo y lo inmovilizó con una llave de estrangulamiento durante varios minutos, sujetándolo incluso cuando había dejado de resistirse.
Neely, una persona sin hogar y con problemas mentales, murió en el lugar como consecuencia de esa compresión en el cuello, según determinó luego el forense.
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Los abogados de Penny, que inicialmente fue interrogado por la Policía y puesto en libertad, han defendido en todo momento que su cliente actuó para protegerse a sí mismo y al resto de pasajeros y que en ningún momento tuvo intención de hacerle daño, y menos acabar con su vida.
El episodio, capturado en video, ha generado en Nueva York un fuerte debate con componentes de raza -Penny es blanco y Neely era negro-, de seguridad pública y por el hecho de que nadie actuó para evitar el fatal desenlace pese a que eran varios los pasajeros que miraban la escena, grababan lo sucedido o incluso contribuían a inmovilizar a Neely.
En los últimos días, la ciudad ha sido escenario de varias protestas para exigir que Penny fuese llevado ante la justicia acusado de asesinato y para reclamar más apoyo para las personas que viven en la calle o que sufren enfermedades mentales.
La acusación presentada finalmente contra Penny es la de homicidio en segundo grado, también conocido como homicidio imprudente, y acarrea una pena máxima de 15 años de cárcel en Nueva York.
Los fiscales deberán probar para ello que el acusado causó la muerte de Neely y que lo hizo sabiendo que la llave que usaba podía ser fatal, aunque su intención no fuese la de hacerle daño.