Padre Marcos Somarriba llama a soldados y policías a no obedecer a corruptos ni asesinos
En su sermón dominical del tercer domingo de Adviento, el sacerdote Marcos Somarriba, hizo un firme llamado a los funcionarios públicos, policías y soldados, para que no sirvan a sistemas corruptos y represivos, sino que actúen con justicia y compasión.
En un firme mensaje, el sacerdote señaló que la corrupción y la injusticia siguen siendo una realidad en muchas administraciones públicas y que la transformación debe comenzar.
Durante su prédica, Somarriba reflexionó sobre el contexto bíblico de Lucas, donde se describe un escenario de opresión bajo el dominio romano, un tiempo marcado por la corrupción y el abuso de poder.
"Lucas describe un contexto de opresión bajo el dominio romano, donde la injusticia y la corrupción eran problemas comunes en la administración pública", señaló Somarriba.
El sacerdote citó las palabras de Juan el Bautista, quien, al ser interrogado por los recaudadores de impuestos, les instruyó: "No cobren más de lo establecido". Este llamado a la ética y la justicia, según Somarriba, es una crítica directa a la corrupción y la avaricia que prevalecen en las instituciones.
“Cada individuo tiene un papel que desempeñar en la búsqueda de la justicia…ser justo con los demás y el cuidado por los demás. También la exhortación de Juan a los recaudadores de impuestos y a los soldados implica que las instituciones deben ser justas y responsables, cuánto sufrimiento no vemos cuando esto no ocurre en una sociedad, la erradicación de la corrupción necesita de un sistema donde la ética y la compasión prevalezca sobre el poder corrupto y la avaricia”, advirtió el religioso.
Somarriba también subrayó la importancia de la solidaridad y la justicia social, basándose en la enseñanza de Juan el Bautista: "El que tenga dos túnicas, que comparta con el que no tiene".
En su llamado a los miembros de las fuerzas de seguridad, Somarriba recordó que el poder de las armas y la autoridad, sólo es legítima cuando se usa para proteger al pueblo y no para someterlo.
"Jesús reconoce que en el corazón de los soldados y policías hay un deseo de hacer el bien. Hoy, ellos también están llamados a cambiar de rumbo y a no obedecer órdenes que dañen al pueblo", subrayó.
“Manifestarse es un derecho, no una concesión. La manifestación de la fe pública, en las diversas tradiciones religiosas y culturales, no es una concesión, es un derecho y libertad, en toda sociedad basada en la justicia y la igualdad. El reprimir y encerrar la fe, limitarla al atrio de la parroquia y prohibir su manifestación es un acto de represión y una falta de razón. Así no se construye la paz”, remarcó Somarriba, cuyas palabras resuenan en un país como Nicaragua, donde la violencia contra los religiosos alcanzó niveles extremos.
Somarriba exhortó a las palabras de Juan el Bautista: "Ya viene otro más poderoso que yo, que los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego", advirtiendo a todos los funcionarios públicos, policías y soldados que el momento de la conversión es ahora.
Finalmente, el sacerdote hizo un llamado directo a los funcionarios públicos como policías y soldados “pregúntate tú que persigues, reprimes y matas, bajo las órdenes de gente llena de maldad y crueldad. Pregúntate qué debo de hacer y escucha a Dios”, concluyó el religioso.