Unos pocos días después del inicio de las manifestaciones contra el gobierno de Daniel Ortega hace tres meses, el primer español en ganar un premio Pulitzer de fotografía estaba de vuelta en Managua para convertir en imágenes la manifestaciones que comenzaba estremecer al país centroamericano.
"Lo que más me llamó la atención es que hay muchas similitudes entre aquella situación y la que está teniendo lugar ahora, cuenta en entrevista con BBC Mundo.
Así, en los últimos meses Bauluz ha estado entre trincheras y manifestaciones, ha sentido de cerca los impactos de las balas, ha asistido a velorios y reuniones, y ha visitado pueblos y ciudades sitiados.
"Cuando llegué había 27 muertos, ahora ya son casi 400", afirma.
El gobierno de Nicaragua atribuye la violencia a grupos delincuenciales y "vándalos de la derecha", aunque los manifestantes aseguran que los responsables de lo que está ocurriendo son grupos paramilitares al servicio de Ortega.
Cuando se cumplen 39 años de la Revolución Sandinista, BBC Mundo le pidió a Bauluz que seleccionara las imágenes que, en su criterio, resumen las protestas en Nicaragua desde la mirada de su lente.
"Creo que estas fotos reflejan los sentimientos que explican lo que están sufriendo los nicaragüenses: el dolor, la valentía, la solidaridad, el duelo, el enojo, la rebelión... la búsqueda de ese derecho a protestar para que no los maten por protestar", señala.
Esta es su selección.
Las protestas
Fue en Managua, en esos primeros días. Estaba siguiendo la manifestación que se dirigía a una cárcel donde están llevando a las personas que detienen las protestas. Cuando los manifestantes iban acercándose, la policía les cerró el pasó".
Esta es una imagen de los cientos de marchas que tienen lugar todos los días en Nicaragua desde abril pasado. Era también un homenaje a los muertos que, por ese entonces, eran solo 30".
La imagen de ese hombre con su bebé creo que resume, de alguna manera, la perseverancia de la gente. A las calles de Nicaragua no solo están saliendo a protestar jóvenes. Hay madres, padres y abuelos, y eso me recuerda muchísimo a la Nicaragua que conocí en los años 80".
Fue una noche en Managua. Esta me parece una imagen con mucho significado, porque esos árboles de la vida o 'arbolatas', como le dicen aquí, son uno de los símbolos del gobierno que mandó a colocar la vicepresidenta Rosario Murillo. "
Estos morteros son el arma principal de los manifestantes, son inofensivos, pero a ellos les disparan con balas. Esta foto creo que simboliza el rechazo a los gobernantes. Hay pancartas gigantes con sus imágenes por toda la Nicaragua".
Esta fue tomada en la cuna de la revolución sandinista, frente a la casa de Sandino. De hecho, atrás hay un busto suyo mientras un joven levanta un mortero. Me parece un símbolo de que muchos sandinistas están también en contra de lo que está sucediendo".
La trincheras
"Estas barricadas están hechas con muchos de los mismos adoquines que utilizaron en la década del 80 para construir las trincheras. En realidad, ahora no son más que una forma de protegerse de las fuerzas paramilitares armadas de Ortega".
"Esta foto me recuerda que, pese a la violencia detrás de la trinchera, también había momentos en que los nicaragüenses demostraban que su humor es incombustible. En esa barricada se leía con altavoces un 'comunicado diario' que se volvía viral en las redes porque se burlaban del jefe de la policía local".
Yo estaba del otro lado de la trinchera. Esos adoquines eran la única protección contra las balas".
"Cristian Gutiérrez Ortega, de 60 años, se rebeló contra el gobierno de Somoza en 1978, pero no sobrevivió a las balas del gobierno de Ortega en 2018. Un francotirador le acertó en el pecho mientras participaba en la defensa de las barricadas junto a sus vecinos".
"Las trincheras solo se abrían para dejar pasar a los muertos".
Los muertos
"Una de las pocas maneras que existen de documentar los muertos por las protestas es ir a los velorios y entierros a hacer estas fotos. Es mi manera de demostrar el dolor que existe por esta situación".
"También he podido documentar el dolor de los niños que se han quedado huérfanos por las protestas. Esta es la hija de Nelson Téllez Huete, de 35 años, muerto por un disparo en el corazón. El joven era sandinista y dejo 4 hijos".
"'¡Mi bebé!', gemía Cinthya López mientras acariciaba el cadáver de Matías Pavón, de cuatro meses, uno de los dos niños quemados vivos junto a cuatro miembros de su familia el pasado 16 de junio. Según me dijeron supervivientes y vecinos, paramilitares del gobierno de Nicaragua quemaron el edificio cuando el padre se negó a que francotiradores subieran al tejado para disparar contra los pobladores del barrio Carlos Marx de Managua que defendían sus barricadas. Los hombres armados además dispararon contra quienes intentaron apagar el fuego".
El dolor y la esperanza
"Fue en una manifestación. La niña, de 15 años, era compañera de Álvaro Conrado, el primero menor que murió durante las protestas. La niña subió a la tarima, se desahogó del dolor que tenía por dentro y este fue el momento en el que baja y abraza a su madre. Me parece uno de los símbolos de esta rebelión".
Muchos de los manifestantes heridos son curados clandestinamente por médicos voluntarios, ya que los hospitales públicos tienen orden del gobierno de no atender a los heridos*. Me parece que es un símbolo de la solidaridad del pueblo de Nicaragua".
(*BBC Mundo no pudo corroborar de forma independiente que el gobierno de Nicaragua haya dado la orden de no atender a los heridos en hospitales públicos).
"Creo que esta es la representación de muchas cosas, pero sobre todo del valor y la determinación de los jóvenes que se han rebelado contra el 'orteguismo'. También del dolor: esa mujer es la madre de uno de los asesinados. Y las dos se unen en ese abrazo que también da esperanza".