Oscar René Vargas: Economía, Centroamérica y el coronavirus
El coronavirus está afectando a todos los países centroamericanos. No sólo resultan trágicas las muertes por este mal, sino que está poniendo en entredicho la infraestructura del sistema de salud de los países
Los efectos económicos son y serán enormes ante la necesidad de confinamiento para detener el contagio, con efectos graves sobre el empleo, la producción y las empresas.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió un “impacto profundo” en la economía de la región. Un 2020 con crecimiento negativo no es un escenario improbable
Por su lado, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), señaló que la pandemia tendrá efectos devastadores en la economía mundial. La CEPAL tiene proyectado que el desempleo en los países centroamericanos se incremente, que el número de pobres suba y que las personas en pobreza extrema aumenten
Centroamérica se verá afectada, también, por una desaceleración económica en Estados Unidos, que repercutirá en menos inversión extranjera directa, baja en flujos de turismo y disminución en el monto de remesas
No hay duda de que el coronavirus pegará, y fuerte, en la economía internacional, del que la economía centroamericana no se salvará. Sin embargo, aún no está claro de qué tamaño será el efecto. Elementos internos y externos han oscurecido el panorama, de manera que es muy posible la contracción de la economía de la región sea severa
Los brotes locales del coronavirus tensarán la actividad económica en el próximo trimestre y agravarán las condiciones comerciales ya inciertas. Lo impredecible de la dureza del brote aún no permite hacer ninguna proyección exacta. No obstante, el contexto externo perjudica gravemente las perspectivas económicas
Las afectaciones impactarán directamente al sector turístico y a las empresas dedicadas al entretenimiento (bares, restaurantes, etcétera). Además, si el coronavirus no llegara a contenerse rápidamente, otras actividades terciarias, como el comercio y los servicios de transporte también se verían afectadas
El cierre de fronteras, escuelas y otras medidas de distanciamiento social que detienen la actividad económica se dan simultáneamente a la desaceleración mundial y la interrupción de las cadenas de suministro, a la depreciación en materias primas que se comercializa, a la contracción del turismo y al endurecimiento de las condiciones financieras mundiales
También preocupan la caída de las inversiones. Una de las causas principales es el temor de los empresarios en los sectores de manufacturas, construcción, comercio y servicios privados no financieros
En Estados Unidos vive un importante número de centroamericanos indocumentados cuyas condiciones son ahora más complicadas y precarias, debido a las políticas antiinmigrantes de Washington
La población centroamericana residente en Estados Unidos sufre y sufrirá por la pandemia del coronavirus debido a la suspensión de actividades laborales, por lo no logrará obtener ingresos para completar la remesa mensual que envía a sus familias; por lo tanto, podría haber una desaceleración de los ingresos por remesas
Por lo tanto, podría presentarse un escenario en el cual las transferencias de remesas tendrían una caída sustancial con efectos negativos en las familias que dependen de esos ingresos y caer en condiciones de pobreza
Centroamérica debiera impulsar medidas conjuntas ante el coronavirus para proteger a los sectores más vulnerables de la región
Para avanzar en la solución de la crisis pasa por la colaboración y la solidaridad entre los países y por avanzar de la cultura de los privilegios a la cultura de la igualdad y la inclusión social
En orden de proteger a la población, los gobiernos centroamericanos deben sacar fondos para la emergencia, con subsidios salariales y eliminación de impuestos para ayudar a los hogares y negocios afectados a enfrentar esta parada temporal y repentina en la producción.