Los Chiguines, dos engendros dinásticos en Nicaragua

En el entramado político de Nicaragua, las trayectorias de Anastasio Somoza Portocarrero y Laureano Ortega Murillo revelan similitudes y diferencias que ilustran la persistencia de las dinastías políticas en la historia del país. A continuación, se desglosa una crónica que detalla las vidas de estos dos individuos.

Anastasio Somoza Portocarrero ("El Chigüín"):

Orígenes y Educación:

Nacido el 18 de diciembre de 1951 en Miami, Florida, Estados Unidos, Anastasio Somoza Portocarrero fue el fruto de la poderosa familia Somoza. Hijo de Anastasio Somoza Debayle y Hope Portocarrero, y nieto de Anastasio Somoza García, sus raíces se hundían profundamente en la élite política nicaragüense. Su educación transcurre en escenarios internacionales: la Escuela Kent en Connecticut, la Universidad de Harvard en Massachusetts y en Inglaterra, en Sandhurst.

Carrera Militar y Empresarial:

Ascendiendo en la jerarquía militar, Somoza Portocarrero se convierte en coronel en el ejército nicaragüense, cuyo control estaba fuertemente enraizado en su familia. A principios de 1978, asume el control del vasto imperio empresarial de los Somoza, valuado en miles de millones de dólares. Su participación activa en las fuerzas armadas durante la insurrección sandinista lo coloca en el centro de una etapa tumultuosa.

Exilio y Controversias:

La caída de la familia Somoza en 1979 marca el exilio forzado de Anastasio Somoza Portocarrero. Acusado de malversación de fondos y del asesinato de un periodista en 1979, su vida se tiñe de controversias. Viviría en el exilio en Miami, pero la especulación sobre su regreso en 2000 generó un revuelo en Nicaragua, evidenciando la persistente sombra de los Somoza en la historia del país. Finalmente se vende como un prospero empresario radicado en Guatemala.

Laureano Ortega Murillo (El Chigüin 2):

Orígenes y educación:

En un giro diferente, Laureano Ortega Murillo, hijo del presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, nació en una Nicaragua el 8 de diciembre de 1983, donde la sombra de los Somoza aún resonaba. Aunque sus inicios estuvieron arraigados en la música, sin mayor éxito como tenor y director de la fundación musical Incanto, a costa del dinero de los nicaragüense, su camino eventualmente se entrelazaría con la política.

Carrera política y diplomática:

Nombrado asesor presidencial para Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional en 2012, Ortega Murillo rápidamente emergió como una figura impuesta en la política nicaragüense. Encabezando delegaciones en misiones diplomáticas y firmando acuerdos bilaterales, su rol ha sido fundamental en el restablecimiento de relaciones diplomáticas con China en 2021. Y con Rusia en el 2023.

Ascenso rápido y rol diplomático:

A sus 40 años, Laureano Ortega Murillo impuestos por sus padres ha hecho protagonismo en el gobierno. Manejando acuerdos diplomáticos, de espionaje y energéticos con China y Rusia, su ascenso dinástico ha sido notorio. Incluso ha participado en intentos de diálogo con Estados Unidos para aliviar las sanciones contra su familia.

Sucesión Presidencial:

Se vislumbran señales de que Ortega y Murillo consideran a Laureano como su “Chigüin”. Su rápido ascenso ha permitido la consolidación del poder familiar, gestionando relaciones clave y, posiblemente, preparándose para asumir un papel presidencial en el futuro.

Similitudes:

Ambos son hijos de presidentes/dictadores y han estado involucrados en la política.

Han enfrentado críticas y controversias debido a las acciones de sus padres.

Los dos veneran a su padre dictador.

Los dos nacieron en el mes de diciembre.

Diferencias:

Anastasio Somoza Portocarrero tiene 72 años, 32 años más que Laureano Ortega que tiene una edad de 40 años.

Anastasio Somoza Portocarrero su madre no tuvo mayor presencia en la política a diferencia de Rosario Murillo que se designó como Vicepresidenta de Nicaragua.

Somoza Portocarrero tuvo un papel militar activo y estuvo vinculado a la caída de su familia en 1979, mientras que Ortega Murillo se ha destacado más en el ámbito de tenor frustrado, diplomático y político.

Ortega Murillo ha sido más joven al asumir roles políticos significativos en comparación con Somoza Portocarrero.

Mientras que Somoza Portocarrero vivió en el exilio, Ortega Murillo ha permanecido en Nicaragua y ha desempeñado roles prominentes en el gobierno. Ortega Murillo ha enfrentado escándalos sexuales mientras que Somoza Portocarrero no.

El Futuro Político:

Predecir el futuro político de Laureano Ortega Murillo es incierto y depende de varios factores. La estabilidad política, la respuesta internacional, las dinámicas internas del gobierno, el apoyo popular y los cambios en el escenario internacional son elementos que moldearán su destino político. Su adaptabilidad política será crucial en este complejo panorama.

Conclusión:

En la compleja telaraña política de Nicaragua, las vidas de Anastasio Somoza Portocarrero y Laureano Ortega Murillo tejen un relato de dinastías persistentes y evoluciones divergentes. Mientras uno emergió en la era de la guerra civil y el exilio, el otro navega en el escenario diplomático contemporáneo, ambos reflejando las complejidades de una nación marcada por la historia y la política. Los dos son figuras sin mayores luces que surgieron como producto del poder dinástico que emana de sus padres.

Laureano Ortega supera a Anastasio Somoza Portocarrero, ya que mientras al segundo se le atribuye como su principal fracaso la gestión de la EEBI, al primero se le suman, como errores políticos y personales, aspectos tales como su desempeño como cantante de ópera de nivel bajo, el fiasco y estafa vinculados a la firma del contrato para la construcción del canal interoceánico, escándalos sexuales, casos de corrupción durante su administración en el aeropuerto Sandino, y el despojo perpetrado por uno de sus socios rusos, quien defraudó a los nicaragüenses mediante una supuesta fábrica de vacunas que nunca llegó a funcionar.

Es probable que, luego del colapso del régimen sandinista, Laureano experimente un destino similar al de su predecesor, Anastasio, enfrentando el rechazo y el exilio por parte de su pueblo y su país.