Vargas “La muerte de Humberto Ortega es un error político que puede costar caro al régimen Ortega-Murillo”

El sociólogo y analista político nicaragüense Oscar René Vargas, desterrado y desnacionalizado por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, opinó que la muerte del General en Retiro Humberto Ortega, como preso político, es un error político de Rosario Murillo.

Así lo sostuvo Vargas en una entrevista a la periodista Lucía Pineda Ubau, en el programa 100% Entrevistas. 

Vargas explicó que Rosario Murillo consolidó su poder tras dar la espalda a su hija  Zoilamérica quien en 1998, acusó a Daniel Ortega de haberla violado, cuando tenía 11 años.

En aquel entonces Murillo apoyó a su esposo, Daniel Ortega, “ese apoyo le permitió a Murillo escalar posiciones de poder y tener una influencia mayor sobre Ortega, lo que marcó su ascenso”, señaló Vargas. 

Sin embargo, el analista advirtió que la muerte de Humberto podría significar el principio de la caída de Murillo, quien habría cometido un grave error al reprimir a Humberto Ortega.

Humberto Ortega, según Vargas, se había convertido en una figura clave para un posible proceso de negociación política en Nicaragua, dadas sus declaraciones críticas hacia el régimen, en una entrevista, con Fabián Medina y su llamado a una salida negociada a la crisis que vive el país. 

Vargas afirmó que la muerte de Humberto, elimina la posibilidad de una negociación factible, ya que el exjefe del Ejército había emergido como un puente entre la oposición y el régimen. 

"Este encarcelamiento y su muerte son un ‘tiro en el pie’, porque están cerrando la posibilidad de una salida negociada", enfatizó Vargas.

El sociólogo advirtió que el régimen de Ortega y Murillo enfrenta una creciente implosión interna, especialmente en las fuerzas armadas. Humberto Ortega, una figura históricamente respetada en el ámbito militar, había creado un malestar en el Ejército con sus declaraciones de mayo de 2023, en las que instaba a su hermano a negociar una salida política. Según Vargas, la muerte de Humberto profundizará ese malestar, y es probable que desencadene una crisis interna que no se podrá controlar fácilmente. 

"La muerte de Humberto Ortega representa una bomba política que traerá repercusiones imprevisibles", dijo Vargas.

Además, subrayó que la falta de una ceremonia pública para el funeral de Humberto Ortega es un indicio de la debilidad del régimen. "La prohibición de una vela pública reflejaría el temor de que militares y exmilitares se reunieran y compartieran ideas sobre la crisis que atraviesa el país.

Vargas también especuló sobre las posibles repercusiones psicológicas de la muerte de Humberto para Daniel Ortega, quien, a pesar de las diferencias con su hermano, podría verse afectado por este suceso. 

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El sociólogo planteó interrogantes sobre el estado actual de las relaciones dentro de la propia familia Ortega-Murillo, especialmente tras la muerte de Humberto, y cómo esto podría influir en el futuro del régimen.

"Hay que averiguar si Daniel Ortega habrá llegado a darle el pésame a sus sobrinos. O los hijos de Daniel , ?presentaron condolencias a sus primos, los hijos de Humberto? Allí hay una fractura al interior de la familia".

EEUU se pronuncia sobre muerte de Humberto Ortega

Brian Nichols, Subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, se pronunció sobre el deceso de Humberto Ortega a través de su cuenta de "X" y dijo "a pesar de tener profundas diferencias con el general del retiro de Nicaragua Humberto Ortega, él llegó a reconocer que el totalitarismo no tiene cabida en Nicaragua. Poco antes de su muerte el 30 de septiembre, Humberto Ortega habló de sus esperanzas por una transición política para la celebración de elecciones y un futuro democrático y de paz en Nicaragua", escribió el funcionario estadounidense.

Al respecto, Oscar René Vargas dijo que se debe fomentar este tipo de reflexión y mostrar de que esta situación no favorece a la dictadura, "se pueda percibir o creer de que eso favorece a la dictadura, pero no, este es otro error que cometió la dictadura, que comenzó a cometer el error de echarlo preso y eso se ha ido profundizando", dijo Vargas.

El ex catedrático, destacó la fractura interna que existe en el Ejército nicaragüense. Señaló que, mientras los altos generales están subordinados y se aferran a sus privilegios, la base del Ejército y los oficiales que ingresaron para hacer carrera militar, priorizan la preservación de la institución. 

Este choque de intereses podría generar más tensiones dentro de las fuerzas armadas, que ya sienten los efectos del malestar iniciado por Humberto Ortega.

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Oscar René Vargas concluyó que el régimen de Ortega-Murillo enfrenta una encrucijada tras la muerte de Humberto Ortega. Mientras que la represión y el control del poder continúan, las fisuras dentro del Ejército, la familia Ortega-Murillo y la base del sandinismo se profundizan. 

La recomendación de Humberto Ortega de negociar para evitar una mayor crisis fue ignorada, y su muerte podría ser el detonante de un caos político que aún está por desarrollarse.