EVITA DECIR ESTAS 5 COSAS A TU HIJO ADOLESCENTE PARA NO VOLVERTE EN SU CONTRA
Lo que nunca deberías decirle a un adolescente...
Llega un momento en que hablar con nuestros hijos adolescentes se hace bastante difícil, parece que nos comunicáramos en diferentes idiomas y que ni tan siquiera mirándonos a los ojos podemos llegar a entendernos, ¿te suena familiar?
Salvo raras excepciones, todos los padres pasamos por esta etapa de incomprensión mutua. Nosotras te damos algunas claves para que comunicarte con tu hijo sea un poco más fácil.
Seguro que tú también lo vives... Cuando dejan de ser niños y entran en la adolescencia,ellos ya no quieren vestir con ropa sin marca o con marcas blancas (marca de supermercado); en vez de eso, quieren vestir con ropa de reconocidas y prestigiosas marcas entre su grupo de amigos, aquellas que todos quieren tener y que por lo general cuestan más dinero.
Para los adolescentes va más allá de una cuestión de marcas, se trata de sentirse aceptados y parte de un grupo. El vestir de determinada forma o con determinadas marcas es para ellos una llave de ingreso al mundo social del que quieren formar parte.
Lo que nunca deberías decirle a un adolescente...
Llega un momento en que hablar con nuestros hijos adolescentes se hace bastante difícil, parece que nos comunicáramos en diferentes idiomas y que ni tan siquiera mirándonos a los ojos podemos llegar a entendernos, ¿te suena familiar?
Salvo raras excepciones, todos los padres pasamos por esta etapa de incomprensión mutua. Nosotras te damos algunas claves para que comunicarte con tu hijo sea un poco más fácil.
Seguro que tú también lo vives... Cuando dejan de ser niños y entran en la adolescencia,ellos ya no quieren vestir con ropa sin marca o con marcas blancas (marca de supermercado); en vez de eso, quieren vestir con ropa de reconocidas y prestigiosas marcas entre su grupo de amigos, aquellas que todos quieren tener y que por lo general cuestan más dinero.
Para los adolescentes va más allá de una cuestión de marcas, se trata de sentirse aceptados y parte de un grupo. El vestir de determinada forma o con determinadas marcas es para ellos una llave de ingreso al mundo social del que quieren formar parte.
Cuando hables con tu hijo, evita hacer otra cosa más que dedicarle tu tiempo y atención, nada de teléfonos, mirar televisión o cocinar. Escucha de verdad lo que tiene para decir.
Si hay algo que los adolescentes detestan es que los padres estemos haciendo varias cosas de forma simultanea mientras les hablamos, lo toman como si no nos interesaran o no merecieran toda nuestra atención.
Ellos ya saben que siempre preguntas lo mismo, ¿cómo te fue en el baile?, ¿cómo te fue en la escuela?, ¿qué tal ha ido tu día? Están aburridos de escuchar siempre lo mismo y hasta les parece hasta falso, simples preguntas por compromiso.
¡Sorprénde a tu hijo! Olvídate de las preguntas cerradas que siempre pueden tener por respuesta tan solo un Sí, No o a Veces. Mejor piensa antes de formularlas e intenta que sean abiertas, para dar pie a que tu hijo responda de forma más amplia y pueda existir un feedback y una comunicación fluida.
Está demostrado que los adolescentes son impulsivos debido a que su corteza frontal se encuentra en pleno desarrollo, por eso en ocasiones ni siquiera ellos mismos pueden responder por qué hicieron determinadas cosas o tomaron ciertas decisiones.
En vez de cuestionar y preguntar con un "por qué", mejor sustituye la pregunta por ¿qué harías la próxima vez?
Lo que nunca deberías decirle a un adolescente...
Llega un momento en que hablar con nuestros hijos adolescentes se hace bastante difícil, parece que nos comunicáramos en diferentes idiomas y que ni tan siquiera mirándonos a los ojos podemos llegar a entendernos, ¿te suena familiar?
Salvo raras excepciones, todos los padres pasamos por esta etapa de incomprensión mutua. Nosotras te damos algunas claves para que comunicarte con tu hijo sea un poco más fácil.
Seguro que tú también lo vives... Cuando dejan de ser niños y entran en la adolescencia,ellos ya no quieren vestir con ropa sin marca o con marcas blancas (marca de supermercado); en vez de eso, quieren vestir con ropa de reconocidas y prestigiosas marcas entre su grupo de amigos, aquellas que todos quieren tener y que por lo general cuestan más dinero.
Para los adolescentes va más allá de una cuestión de marcas, se trata de sentirse aceptados y parte de un grupo. El vestir de determinada forma o con determinadas marcas es para ellos una llave de ingreso al mundo social del que quieren formar parte.
Cuando hables con tu hijo, evita hacer otra cosa más que dedicarle tu tiempo y atención, nada de teléfonos, mirar televisión o cocinar. Escucha de verdad lo que tiene para decir.
Si hay algo que los adolescentes detestan es que los padres estemos haciendo varias cosas de forma simultanea mientras les hablamos, lo toman como si no nos interesaran o no merecieran toda nuestra atención.
Ellos ya saben que siempre preguntas lo mismo, ¿cómo te fue en el baile?, ¿cómo te fue en la escuela?, ¿qué tal ha ido tu día? Están aburridos de escuchar siempre lo mismo y hasta les parece hasta falso, simples preguntas por compromiso.
¡Sorprénde a tu hijo! Olvídate de las preguntas cerradas que siempre pueden tener por respuesta tan solo un Sí, No o a Veces. Mejor piensa antes de formularlas e intenta que sean abiertas, para dar pie a que tu hijo responda de forma más amplia y pueda existir un feedback y una comunicación fluida.
>> ¿A qué edad los adolescentes tienen su primera vez?
Está demostrado que los adolescentes son impulsivos debido a que su corteza frontal se encuentra en pleno desarrollo, por eso en ocasiones ni siquiera ellos mismos pueden responder por qué hicieron determinadas cosas o tomaron ciertas decisiones.
En vez de cuestionar y preguntar con un "por qué", mejor sustituye la pregunta por ¿qué harías la próxima vez?
Esta pregunta suele ser frecuente cuando nos enteramos que nuestros hijos están siendo acosados, discriminados o hasta golpeados. Lo que ocurre es que preguntando "Por qué no te defiendes" solo conseguimos intimidarlos, haciendo que crean que pensamos que no son capaces de defenderse.
Lo mejor es buscar detalles de forma sutil en su relato para preguntar, por ejemplo ¿cuándo ha ocurrido esto?, ¿quién estaba contigo?, ¿alguien más lo vio?
A los adolescentes les enoja que los padres les hagamos preguntas, y mucho más cuando son preguntas que de algún modo cuestionan su comportamiento. Es natural y hasta sano que nos preocupemos por su bienestar, pero tratemos de controlarnos. No caigamos en usar como justificativo de nuestros temores un "Porque soy tu madre y tengo que saber".
IM
#1 "¡Qué importa que la ropa no sea de marca!"
WAVEBREAKMEDIA LTD/WAVEBREAK MEDIA/THINKSTOCK
CLAUDIAVEJA/ISTOCK/THINKSTOCK
#1 "¡Qué importa que la ropa no sea de marca!"
WAVEBREAKMEDIA LTD/WAVEBREAK MEDIA/THINKSTOCK
#2 "Háblame que yo te escucho"
MONKEYBUSINESSIMAGES/ISTOCK/THINKSTOCK
#3 "¿Cómo te fue en la escuela?"
ISTOCK/THINKSTOCK
#4 "¿Por qué?"
JUPITERIMAGES/PIXLAND/THINKSTOCK
CLAUDIAVEJA/ISTOCK/THINKSTOCK
#1 "¡Qué importa que la ropa no sea de marca!"
WAVEBREAKMEDIA LTD/WAVEBREAK MEDIA/THINKSTOCK
#2 "Háblame que yo te escucho"
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#3 "¿Cómo te fue en la escuela?"
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#4 "¿Por qué?"
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#5 "¿Por qué no te defiendes?"
THINKSTOCK © HEMERA