Nicaragua sale de lista gris del GAFI sobre lavado de dinero, pero cuestiona aplicación "incorrecta" de leyes a ONG
Nicaragua y Pakistán salieron este viernes de la llamada lista gris del Grupo de Acción Financiera (GAFI), mientras que la República Democrática del Congo (RDC), Tanzania y Mozambique pasaron a formar parte de ese grupo de jurisdicciones bajo supervisión especial por sus deficiencias.
Al término de una sesión plenaria de dos días celebrada en París, el presidente del GAFI, Raja Kumar, destacó que Nicaragua "ha dado pasos" para corregir los fallos que se habían detectado y para cumplir con el plan de acción que se le fijó en febrero de 2020.
No obstante, este organismo hizo notar que está "muy preocupado por la posible aplicación incorrecta" de los estándares del organismo en lo que se refiere al régimen del sector no lucrativo.
En el caso de Pakistán, el GAFI también constató los "progresos significativos" en el cumplimiento de los planes de acción para corregir las deficiencias identificadas en junio de 2018 y en junio de 2021.
El último de esos planes se ha completado antes del plazo fijado con los 34 puntos que se le habían señalado.
Kumar indicó que a finales de agosto hubo una visita del GAFI a ese país que pudo comprobar que había "un alto nivel de compromiso" y "voluntad de seguir haciendo mejoras en el futuro".
La otra cara de la moneda son la RDC, Tanzania y Mozambique, que pasan a formar parte de las 22 jurisdicciones de esa lista gris que, según la definición oficial, "están trabajando activamente con el GAFI para corregir las deficiencias estratégicas" en sus regímenes de lucha contra el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la proliferación de armas de destrucción masiva.
En esa lista también están Albania, Barbados, Burkina Faso, Camboya, Islas Caimán, Gibraltar, Haití, Jamaica, Jordania, Mali, Marruecos, Panamá, Filipinas, Senegal, Sudán del Sur, Siria, Turquía, Uganda y los Emiratos Árabes Unidos.
Kumar lanzó una advertencia a Panamá porque, aunque ha habido avances en lo que se refiere al dispositivo contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo, en particular con sanciones "efectivas, proporcionadas y disuasorias", no ha cumplido con varias medidas de su plan de acción, para el que se le había dado de plazo hasta enero de 2021.
En la práctica, se le ha dado un ultimátum para que de aquí a febrero de 2023 complete ese plan de acción.
En caso contrario, se evaluará la conveniencia de que los miembros del GAFI y el resto de jurisdicciones refuercen la supervisión, con lo que eso supone de restricción de las relaciones de negocio y las transacciones con Panamá.
¿Y los presos políticos?
El ex embajador de Nicaragua en la OEA, Arturo McFields, calificó de “ridículo” que el GAFI señale que Nicaragua ha "dado pasos" para corregir los fallos que se habían detectado, pese a que existen presos políticos, entre ellos empresarios y directores de la banca nacional.
“Parece ridículo es que un organismo que ve temas financieros diga que han habido progresos en la dictadura en tema financieros, de lavado, de transparencia, cuando en Nicaragua hay presos políticos que son empresarios privados y hasta ex directores generales de bancos, entonces ¿cómo va haber seguridad y transparencia financiera? cuando se está viviendo eso y lo peor, dicen que hay progreso de parte de la dictadura este pronunciamiento es lamentable, es vergonzoso y le da luz verde a la dictadura para que siga adelante con sus abusos”, señalan.