Nicaragua: Turismo perdería 500 millones de dólares por ambiente de inseguridad
La Isla de Ometepe, un referente del turismo nacional e internacional, ha sido el nuevo blanco de la policía y paramilitares sandinistas, quienes se han dispuestos a perseguir y detener a los manifestantes. “Con la presencia militar y de paramilitares (se) está resintiendo la afectación de la imagen como destino turístico de la isla”, dijo Lucy Valenti, presidenta de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur).
Canatur, en su reciente informe, señaló que por la crisis que vive Nicaragua el turismo dejará de percibir 400 millones de dólares en comparación con el 2017, y 500 millones de dólares proyectados (antes de la crisis) para finales de este año.
Valenti expresó que la demanda del empresariado turístico es asegurar la estabilidad en el país, pero la situación violenta que se vive en la Isla de Ometepe “manda señales equivocadas hacia afuera (el extranjero)”. Esto llevó a que vuelos internacionales haya sido cancelados y que las embajadas de distintos países alertara a sus ciudadanos de no visitar Nicaragua.
“La afectación es muy seria”, lamentó Valenti, quien agregó que unos 600 mil turistas dejaron de visitar Nicaragua.
“Estamos viendo que en cualquier momento se da situaciones de represión en cualquier parte por las manifestaciones del pueblo… esto no abona a la estabilidad y a los niveles de seguridad del país e imagen de Nicaragua”, dijo la presidenta de Canatur.
Gobierno manda señal equivocada
Lucy Valenti insistió que la represión, violencia y detención manda una señal equivocada del país, obligando a los turistas extranjeros cambiar su destino. “Esto pasa a cada momento (la violencia), ante los ojos de todo el mundo y eso manda señales al exterior de que Nicaragua no es un país seguro, no es estable, no es un país donde se respete los derechos fundamentales de la gente y eso hace que esas advertencias de viaje se mantengan y repercuta en los turistas que programan y deciden dónde pasar sus vacaciones, y eso obviamente excluye a Nicaragua”, refutó.
Aunque el sector turismo es uno de los más golpeados por la crisis sociopolítica, Valenti destacó que lo más les preocupa son las personas que “viven y sufren las consecuencias de esta represión”.