Fallece coronel salvadoreño vinculado con la masacre de seis jesuitas en 1989
San Salvador, 10 ene (EFE).- El coronel salvadoreño retirado Francisco Elena Fuentes, vinculado con la masacre de seis padres jesuitas y dos mujeres en 1989, falleció la noche del domingo en la capital de El Salvador a raíz de un "problema craneal", según confirmó este lunes a Efe su defensor, Lisandro Quintanilla.
"Sí, murió anoche. Estaba en coma por un problema craneal. Yo lo defendía", dijo Quintanilla a Efe.
Elena Fuentes es señalado de ser uno de los supuestos autores intelectuales de la referida masacre junto al expresidente Alfredo Cristiani, los generales Humberto Larios, Juan Bustillo y Rafael Zepeda, el fallecido René Emilio Ponce y el coronel Inocente Montano, condenado en España por este crimen.
El Informe de la Comisión de la Verdad de 1992 señaló que "existe prueba sustancia" de que Ponce "en confabulación" con Bustillo, Zepeda y Elena Fuentes "dio la orden" de asesinar a los jesuitas, sin dejar testigos.
"Existe plena prueba de que posteriormente todos esos oficiales y otros en conocimiento de lo ocurrido, tomaron medidas para ocultarlo", indica el informe.
El militar fallecido era parte de la generación de graduados de la Escuela Militar de 1966, conocida popularmente como "La Tandona", que dirigieron a la Fuerza Armada durante buena parte de la guerra e implementaron la estrategia contrainsurgente de "tierra arrasada".
La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador ordenó recientemente que el proceso penal por la masacre se reabraLa Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador ordenó recientemente que el proceso penal por la masacre se reabra tras resolver una demanda de amparo presentado por el fiscal general, Rodolfo Delgado, de acuerdo con una resolución dada a conocer el 5 de enero.
La madrugada del 16 de noviembre de 1989, en medio de la mayor ofensiva guerrillera registrada durante la guerra civil salvadoreña (1980-1992), un comando de soldados de elite mató a los religiosos y a dos mujeres en el campus de la jesuita Universidad Centroamericana (UCA).
Las víctimas son los españoles Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín-Baró, Amando López y Juan Ramón Moreno y el salvadoreño Joaquín López. También a Elba Ramos y su hija Celina, colaboradoras de los religiosos.