Juzgado programa nuevas exhumaciones de la masacre salvadoreña de El Mozote

San Salvador, 4 jul (EFE).- Un juzgado de instrucción de El Salvador programó para mediados de julio nuevas exhumaciones de víctimas de la masacre en la remota localidad de El Mozote (1981), donde el Ejército ejecutó a unos 1.000 civiles, según dijo a Efe un abogado de una de las organizaciones que apoyan a los sobrevivientes.

De acuerdo con Antonio Aguilar, abogado de la organización humanitaria Cristosal, las exhumaciones se realizarán entre el 18 y 29 de julio en dos jornadas en el cantón Cerro Pando, en el oriental departamento de Morazán.

Indicó que estas diligencias se realizarán a petición de la Fiscalía General de la República (FGR) para la localización de 9 víctimas de la referida masacre.

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El Registro Oficial y Único de Víctimas y Familiares de Víctimas de Graves Violaciones a los Derechos Humanos de las Masacres de El Mozote y Lugares Aledaños registra un total de 1.730 víctimas, de las que 988 fueron ejecutadas y 665 son familiares, además 48 sobrevivientes y 29 personas desplazadas.

Del total de víctimas ejecutadas por el batallón Atlacatl, 496 fueron hombres, 480 mujeres y 12 "no nacidos".

A finales de febrero pasado, un grupo de forenses, apoyado por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), encontró los restos de cinco víctimas de la masacre de El Mozote, pertenecientes a una mujer adulta y cuatro niños.

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A mediados de dicho mes, los forenses también realizaron excavaciones en el lugar conocido como Cerro Pando, donde se buscaban restos de 11 personas y únicamente se encontraron restos óseos.

Según el Informe de la Comisión de la Verdad de las Naciones Unidas en El Salvador de 1993, entre el 10 y el 13 de diciembre de 1981, unidades del Batallón Atlácatl torturaron y ejecutaron "deliberada y sistemáticamente" a niños, hombres y mujeres del cantón El Mozote y otros sitios aledaños.

Por esta masacre son procesados penalmente más de una docena de mandos militares retirados, que son acusados por crímenes de lesa humanidad.