Flujo migratorio aumenta riesgo del brote de enfermedades en Latinoamérica
La Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) alertó que su personal y voluntarios en América Latina están constatando un elevado número de personas migrando de un país a otro con “graves necesidades médicas y que requieren atención urgente”.
En ese contexto, agregó el organismo, el riesgo de brote de enfermedades como el sarampión, la difteria y la tuberculosis es alto.
Ante el aumento de las necesidades humanitarias, generadas en particular por el éxodo de venezolanos de su país, la FICR ha decidido reforzar su apoyo a las sociedades nacionales de la Cruz Roja.
Esta entidad, que coordina el trabajo de socorro y la ayuda de emergencia a través de la Cruz Roja en cada país, trabaja con la estimación de que entre 1,6 y 4 millones de personas están en movimiento en el continente americano buscando escapar de la inestabilidad e inseguridad que reina en sus países.
Otros casos a los que la FICR hace referencia son los de Nicaragua, donde una represión política ha forzado a miles de ciudadanos a escapar del país, así como a los movimientos de inmigrantes irregulares entre Centroamérica y Norteamérica.
“Se convertirá en una grave crisis si ellos encuentran hostilidad y exclusión (en los países a los que llegan), en lugar de la ayuda, respeto y compasión que toda persona vulnerable merece, no importa quién sea o de dónde venga”, dijo el presidente de la FICR, Francesco Rocca.
En una declaración emitida desde su sede en Ginebra, el responsable señaló que preocupa en particular la seguridad de los ancianos, las mujeres y los niños que están desplazándose.
“Hay muchas vidas que están en juego y nuestro sentido de humanidad debe extenderse más allá de las fronteras”, pidió Rocca.