Convocan a cancilleres del TIAR por crisis en Venezuela
Doce países integrantes del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca votaron el miércoles a favor de convocar a los cancilleres de las 19 naciones signatarias del tratado para que aborden la crisis venezolana.
Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Guatemala, Haití, Honduras, El Salvador, Estados Unidos, Paraguay, República Dominicana y Venezuela, representada por el emisario de la oposición Gustavo Tarre, aprobaron que los cancilleres del TIAR se reúnan durante la segunda mitad de septiembre, sin precisar sitio ni fecha. Trinidad y Tobago, Uruguay, Costa Rica, Panamá y Perú se abstuvieron y Bahamas se ausentó.
El secretario de Estado Mike Pompeo señaló que la convocatoria de los cancilleres demuestra que el gobierno de Nicolás Maduro tiene una “influencia desestabilizadora” en la región. “Maduro no sólo amenaza al pueblo venezolano, sus acciones amenazan la paz y seguridad de los vecinos de Venezuela”, señaló en un comunicado.
El grupo de los 19 países miembros del TIAR lo completa Cuba, que no participa en la OEA pero no se ha retirado del TIAR como sí lo hicieron Ecuador, Nicaragua, México y Bolivia. Costa Rica, Chile y Perú intentaron infructuosamente incluir una enmienda para eliminar de manera explícita la acción militar entre las opciones que el tratado dispone para abordar las crisis en los países que pongan en riesgo la estabilidad continental. El tratado establece que los cancilleres tienen opciones que también incluyen la ruptura de relaciones diplomáticas y la interrupción parcial o total de las relaciones económicas y las comunicaciones.
Estados Unidos dijo esta semana que la invocación del TIAR no persigue una acción armada sino establecer un marco jurídico dentro del cual los países miembros puedan ejercer aún más presión para generar un cambio democrático en Venezuela.
La Asamblea Nacional, controlada por la oposición, aprobó en julio el regreso de Venezuela al TIAR para fortalecer la cooperación con los países de la región y elevar la presión contra el presidente Maduro. La oposición venezolana prepara un expediente dirigido a los cancilleres en el cual argumentará que se justifica invocar al TIAR porque la propagación de enfermedades y el flujo migratorio proveniente de Venezuela constituyen, entre otras razones, una amenaza a la paz del continente. Varios países que no integran el TIAR se pronunciaron en contra de invocar el tratado.
Bolivia se retiró de la sala y México y Uruguay se opusieron por considerar que el TIAR es inapropiado para responder a una crisis interna como la venezolana. “Nos acercamos a un punto sin retorno. Nadie gana y todos pierden”, dijo la embajadora mexicana Luz Baños. “Si la intervención armada no es la meta, ¿para qué recurrir a un instrumento obsoleto?”
El canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo precedió la votación acusando a Maduro de cobijar en su territorio a grupos armados como la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) y los disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). “El régimen de Maduro recibe respaldo político y control social. Los grupos reciben protección, apoyo logístico, entrenamiento y armamento”, dijo durante una encendida intervención de casi una hora en la que no se refirió al TIAR. Trujillo exhortó a los 34 países miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA) a enfrentar juntos lo que calificó como “la mayor amenaza para la seguridad democrática y la estabilidad de la región” a través de medidas contempladas en la Convención Interamericana contra el Terrorismo y otros instrumentos del derecho internacional.
También consideró una “bravuconada” la orden de Maduro de desplegar esta semana misiles antiaéreos y realizar ejercicios militares a lo largo de la frontera con Colombia. “Presentan los ejercicios como una reacción a la supuesta agresión de Colombia. ¿Cuál agresión, si Colombia es el agredido?”, dijo.
Desde Bogotá, el comandante de las fuerzas militares colombianas, general Luis Navarro, dijo en rueda de prensa que ante las maniobras venezolanas “estamos en una alerta especial porque en las fronteras de Colombia con Venezuela hay unos factores de economías ilícitas, grupos armados organizados que están delinquiendo en áreas de frontera”.
El gobierno socialista venezolano ha acusado reiteradamente al presidente colombiano Iván Duque de establecer campamentos de entrenamiento para que paramilitares lancen ataques violentos contra Maduro. El Consejo Permanente aprobó también el miércoles una resolución que condena el hostigamiento de Maduro a los opositores que resultaron electos a la Asamblea Nacional venezolana.