Sepultan a tres nicaragüenses migrantes en una semana
Esta semana fueron repatriados los cuerpos de tres migrantes nicaragüenses que murieron en México cuando intentaban llegar de forma irregular a Estados Unidos. Se trata de Gisell Nohemí Martínez Alfaro, de 26 años, Aldo Román Vallejos Mejía, de 43 años y Edgard Josué Centeno Palacios de 27 años de edad.
Gisell Nohemí Martínez Alfaro y Aldo Román Vallejos Mejía fallecieron en un accidente, cuando la camioneta en la que viajaban cayó desde un puente a una profundidad de más de diez metros en el kilómetro 3 de la carretera Veracruz – México.
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Martínez Alfaro fue sepultada en San Isidro, Matagalpa. La joven era licenciada en laboratorio clínico y estudiante del tercer año de la carrera de Medicina Veterinaria en la antes Universidad Católica del Trópico Seco (UCATSE) en Estelí.
Nubia Alfaro, madre de la joven, dijo a medios locales que su hija solicitó la visa en la Embajada Norteamericana, pero le fue negada por lo que decidió realizar la peligrosa travesía.
Las honras fúnebres se llevaron a cabo el pasado 02 de mayo, ese mismo día también fue sepultado en el cementerio Jardines del Recuerdo en Managua, Aldo Román Vallejos Mejía, quien iba en la misma camioneta con Gissell.
Familiares de Vallejos Mejía, informaron que salió de Nicaragua el lunes 11 de abril rumbo a Estados Unidos con la ilusión de reencontrarse con su mamá.
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El pasado 03 de mayo fue sepultado Edgar Centeno de 26 años, quien era ingeniero agrónomo y tenía una venta de productos agroquímicos en Condega, Estelí.
Centeno murió ahogado cuando intentó cruzar el Río Bravo por Piedras Negras. Su cuerpo fue encontrado el 15 de marzo, y llevado a una morgue en Texas.
La familia de Centeno informó a Despacho 505 que antes de aparecer su cuerpo, el coyote contratado para llevarlo a EE. UU. se comunicó con ellos y les dijo que habían cruzado con bien. Sin embargo, después se confirmó que no había sobrevivido.
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Se estima que entre marzo y abril, han muerto unos 15 nicaragüenses en su intento por llegar a EEUU, la mayoría murió mientras trataba de cruzar el Río Bravo, también conocido como Río Grande.