Daniel Ortega utiliza la migración como un “arma” contra EEUU, dictadura “daña al mundo”

El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo utiliza la migración como un “arma” contra Estados Unidos, aumentando el peso de la crisis humanitaria, señala Diálogo Interamericano en el informe “Daniel Ortega y la armamentización de la migración contra Estados Unidos”.

Según el análisis, el régimen sandinista está empeñado en "convertir la migración en un arma" para dañar a Estados Unidos. Primero, el círculo político del régimen cambió de táctica respecto de la migración de cubanos y otras nacionalidades, aprovechando el elevado número de personas de diversas nacionalidades que huían de sus países.

Explican que el 92 por ciento de toda la migración irregular que llega a la frontera con México provienen de países como China, Colombia, Cuba, Ecuador, El Salvador, Filipinas, Guatemala, Haití, Honduras, India, México, Myanmar, Nicaragua, Perú, Rusia, Turquía, Ucrania y Venezuela.

Es decir que “ninguno de estos migrantes proviene de países políticamente estables, donde predomina el estado de derecho o donde hay libertad de expresión. Todos los países están por debajo del promedio o mediana mundial del indicador de gobernanza del Banco Mundial”, reza la publicación.

En el caso de los nicaragüenses representan ahora el cuatro por ciento de toda la migración que salió a Estados Unidos entre agosto de 2020 y diciembre de 2023. Además, la proporción de llegadas de estas nacionalidades y la débil gobernanza son visibles.

Aumenta peso en crisis humanitaria

En este sentido, el informe señala que el régimen Ortega Murillo aprovechó la oportunidad económica y política para 'convertir la migración en un arma' como política exterior contra Washington y aumentó el peso de la crisis humanitaria. 

Primero, eliminó las restricciones de visados a los cubanos.

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Luego en 2023, procedió a eliminar las restricciones de visas a varias nacionalidades, incluidos los haitianos.

Según Diálogo Interamericano, en abril de 2023, el gobierno contrató a una empresa con sede en Dubai para capacitar al equipo de aviación civil de Nicaragua en la gestión de trámites migratorios de pasajeros en vuelos chárter. 

Como resultado se documentó que entre junio de 2023 y noviembre de 2023 se registraron más de quinientos vuelos chárter, aumentando la llegada y salida de vuelos de 45 a 93 y generando un tránsito desde Nicaragua de más de 100.000 pasajeros desde Puerto Príncipe, La Habana, y Providenciales a Managua para realizar el viaje a Estados Unidos.

Aunque la administración de Joe Biden frenó momentáneamente esta forma de agresión, Nicaragua ha querido continuar por ese camino y aprovechó la oportunidad para facilitar en tres ocasiones el paso de extranjeros procedentes de la India desde Dubai de manera que se facilitara su viaje.

EEUU evita antagonizar

Mientras Daniel Ortega ha aprovechado la migración como arma de ataque contra el espíritu democrático y el derecho internacional, Estados Unidos ha evitado antagonizar su relación con el régimen. 

Según el informe, una de las razones que se ha dado es que utilizar sanciones como política genera un impacto económico adverso en la población, que podría traducirse en emigración.

La realidad es todo lo contrario.

Señalan que las sanciones al círculo de poder de Ortega-Murillo han tenido el efecto de minimizar el margen de operación de los transgresores y reducir el número de operadores internacionales del régimen. 

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Contrariamente a los argumentos de Ortega, la ausencia de sanciones se produce en un momento en el que hay más represión y emigración.

Es decir, la migración ha aumentado como resultado de factores políticos, la confianza de los inversores y la inseguridad judicial.

“El cálculo político de Estados Unidos ha sido pecar del lado del riesgo moral en lugar de acompañar las sanciones con una política exterior consistente con el impacto de estos países en el interés nacional y las prioridades democráticas de la actual administración”, señalan.

Concluyen en que “Nicaragua es un caso emblemático de cómo un Estado paria está dañando al mundo al aumentar la migración y apoyar el movimiento de personas que exacerba la crisis migratoria. Estados Unidos debe penalizar proporcionalmente tanto las violaciones de Nicaragua de sus compromisos internacionales como sus ataques a Estados Unidos”.