Régimen sandinista mantiene represión sistemática señala informe del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua

El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más presentó un informe de las principales violaciones a derechos humanos que cometió el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo contra las voces críticas a través del recrudecimiento sistemático de la represión y persecución.

Ortega-Murillo imponen un estado de excepción de facto, con tres cuerpos armados en violación al orden constitucional los cuales realizan ejecuciones arbitrarias contra la vida. Entre algunas violaciones se exponen los procesos y condenas injustas, la tortura, el desplazamiento forzado, la criminalización y persecución contra toda expresión ciudadana, y asedio contra familiares de presos políticos.

En el caso de los periodistas independientes se registran agresiones contra la libertad de expresión a través de presiones económicas con el aumento de impuestos y negación de publicidad, con Radio Stereo Romance Digital y Canal 12 de televisión.

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El informe señala asedio a Radio Corporación, Radio La Costeñísima y fotoreportero Frank Cortés; así como agresiones físicas a periodistas como el caso de Veronica Chavez y Josue Garay que el pasado 11 de octubre resultaron lesionados cuando salían de una reunión de la opositora Coalición Nacional.

El Colectivo recoge las acusaciones y condenas arbitrarias contra la reportera Kalúa Salazar de Radio La Costeñísima, quien fue acusada y condenada arbitraria e injustamente el 23 de septiembre por el Juzgado Penal Local de Bluefields por el delito de calumnias en represalia por dar cobertura a una denuncia de corrupción en la alcaldía del municipio de “El Rama”

Los periodistas David Quintana, de Boletín Ecológico, William Aragón corresponsal de la Prensa y Elsa Espinoza también fueron sometidos a acusaciones judiciales para criminalizar su labor y estigmatizarles como “divulgadores de noticias falsas” de acuerdo a la estrategia de Estado para suprimir la libertad de prensa.

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Respecto a las Campañas de Odio entre los comunicadores que fueron objeto de estos ataques está el comunicador de Matagalpa Sergio Simpson y el periodista exiliado en Costa Rica, Gerall Chávez, quien fue amenazado a través un video animado que simuló su decapitación y muerte por múltiples disparos.

El informe también recoge las agresiones contra defensores y defensoras de derechos humanos, familiares de víctimas de abril, organizaciones de personas presas políticas y excarceladas que demandan el cese de la represión y justicia. La represión fue dirigida para descalificar su trabajo y suprimir su labor de defensoría de derechos humanos.

Respecto a los presos políticos, el Colectivo señala que las madres han denunciado los malos tratos, actos de tortura en celdas de castigo conocidas como la 300, en el contexto de la huelga de hambre con aislamiento en celdas de seguridad, incomunicación con familiares y otros tratos crueles inhumanos para que desistirán de la protesta.

El informe señala que los excarcelados políticos también sufren asedio permanente y hostigamientos policial. 

En el caso de las organizaciones políticas opositoras como Coalición Nacional fueron objeto de persecución policial y paramilitares, el informe apunta a agresiones físicas, amenazas e intimidación.

Activistas de la Coalición Nacional Félix Maradiaga, Miguel Mora, Saturnino Serrato, Medardo Mairena, Luis Fley, entre otros fueron acosados y perseguidos en Carazo por agentes policiales y paramilitares que impidieron su movilidad, indican. 

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Respecto a la represión legislativa figura la aprobación de la Ley Especial de Ciberdelitos, que amenaza con reprimir con prisión a medios de comunicación que divulguen violaciones de derechos humanos desde sus plataformas y que al arbitrio del Estado y sus agentes sean consideradas como “noticias falsas”. 

El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, reiteró su compromiso con las víctimas de violaciones sistemática represión cuyo máximo responsable es la familia Ortega Murillo.