Daniel Ortega reaparece celebrando "Gritería" luciendo chaqueta de marca "adidas"
El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega celebró con sus hijos, nietos, y nueras junto a Rosario Murillo, la tradicional "Gritería". El gobernante del país reapareció tras 29 días de ausencia pública. Ortega quien se considera "cristiano" ha realizado duros ataques y amenazas contra la Iglesia católica de Nicaragua.
Daniel Ortega y Rosario Murillo suelen aparecer en esta celebración que la realizan de forma "privada" encerrados en su búnker ubicado en residencial El Carmen. Atrás dejaron los años en que salían a la avenida Bolívar a realizar recorridos por los altares que monta la alcaldía de Managua por orientaciones de Murillo. Desde hace tres años Ortega y Murillo evitan salir del perímetro donde viven y despachan los asuntos de estado. Dicha residencia está fuertemente custodiada por policías y otro equipo de guardias privados.
En las fotografías mostradas por los medios oficialistas Ortega luce una chaqueta de la marca alemana "Adidas", precisamente en esta semana cuando el Embajador de Alemania en Nicaragua, Christoph Bundscherer, abogó por la democracia en el país y exaltó la valentía de los jóvenes que luchan por la libertad. Un discurso que brindó durante la graduación de bachilleres del Colegio Alemán Nicaragüense, donde una de las graduadas era la nieta de Ortega, la joven Avril Ortega Díaz, quien también es nieta del sancionado jefe de la Policía Nacional, Comisionado General Francisco Díaz.
"Todo país debería estar orgulloso de su juventud que participa en la vida política, que lucha por un futuro mejor para su país" expresó el embajador en su discurso y entre los padres de familia se encontraba Maurice Ortega Murillo, hijo de la pareja dictadora de Nicaragua y quien dirige el canal 13. El embajador lamentó que muchos jóvenes "pagan un alto precio por su lucha”.
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El régimen de Daniel Ortega mantiene a 168 presas y presos políticos en cárceles de tortura y se impuso nuevamente en la presidencia tras una farsa electoral el pasado 7 de noviembre. Gobiernos democráticos de las Américas y Europa han rechazado la farsa y demandan a través de la OEA que se repitan los comicios, pero antes es urgente liberar a los presos políticos.