Realizan misa en Ginebra en honor a Don Álvaro Conrado. Lizeth Dávila "un gran padre, un gran amigo"
En Ginebra, Suiza, Lizeth Dávila y su familia participaron en una misa en homenaje a su esposo Álvaro Conrado, padre de Alvarito Conrado, asesinado en las protestas de abril de 2018 en Nicaragua.
Dávila y sus hijos, aprovecharon el oficio religioso para encontrar resignación ante la pérdida de sus seres amados y buscar las fuerzas para demandar justicia.
“Fue un impacto muy grande para nosotras. Álvaro fue un gran padre y un buen amigo y pues en estos momentos es cuando más falta nos hace. Siempre contábamos con él, opinaba y hoy día nos ha dejado solas” lamentó Dávila, quien recordó que su esposo fue presidente de la Asociación Madres de AbrilAsociación Madres de Abril, AMA y estaba tiempo completo dedicado a la organización.
Los Conrado fueron una de las primeras familias enlutadas en Nicaragua durante las protestas de abril.
“AlvaritoAlvarito fue un estudiante del Instituto Loyola que el 20 de abril repartía agua a los estudiantes universitarios que protestaban en los alrededores de la Catedral de Managua. Una bala lo hirió de muerte en la garganta y aún herido alcanzó a decir la icónica frase “Me duele respirar”, que se volvió consigna en contra de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Don Álvaro padre, falleció repentinamente el viernes 27 de enero, minutos después de ingresar al Hospital Antonio Lenín Fonseca en Managua y es recordado por su incesante búsqueda de justicia.
“Yo nunca esperaba perderlo en tan corto tiempo. Comenzamos a luchar desde el primer día que nos arrebataron la vida de Alvarito, y en esta ruta de la justicia también me ha dejado sola, pero creo que también esa es mi fortaleza, continuar esa búsqueda, ese trabajo arduo que él como padre también venía haciendo hasta el último día de su vida…” compartió Dávila.
A pesar de su ausencia física, la familia Conrado está más unida y esperan ver el día en que el régimen de Daniel Ortega y Rosario MurilloRosario Murillo pague por sus crímenes.
“No tenemos su apoyo físico pero sí sé cuáles eran los anhelos de él. Quedamos mis hijos y yo buscando justicia, es un derecho que tenemos y ver pagar al culpable” dijo Lizeth Dávila en declaraciones a 100% Noticias.