Dictadura en Nicaragua detiene a dos sacerdotes, y aclaran que un tercero se mantiene en parroquia

La dictadura de Daniel Ortega, ordenó la detención de dos sacerdotes la noche de este domingo en Nicaragua. Los sacerdotes Iván Centeno y Julio Norori, fueron sacados de sus iglesias por civiles conocidos como "paramilitares". Ambos son de la Diócesis de Estelí. 

Aunque en redes sociales se informó que el padre Erick Ramírez, fue también secuestrado, en el Facebook de su Parroquia Cristo Rey Telpaneca, aclararon que su párroco Erick Ramírez "se encuentra en perfectas condiciones en la parroquia".

"Tres sacerdotes más arrestados esta noche por la dictadura sandinista de Daniel Ortega. Continúa la feroz persecución contra la Iglesia Católica. Pido a la Iglesia en el mundo entero sus oraciones por Nicaragua y por nuestra Iglesia perseguida" denunció el obispo auxiliar de Managua, Monseñor Silvio Báez. 

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El sacerdote Iván Centeno pertenece a la parroquia Inmaculada Concepción de María, de Jalapa, Nueva Segovia. El padre Julio Ricardo Norori, es de la parroquia San Juan Evangelista de San Juan del Río Coco, Madriz.

La diócesis de Estelí, tiene como administrador apostólico a Monseñor Rolando Álvarez, quien es preso de la dictadura Ortega Murillo y lleva más de 7 meses preso. 

100% Noticias supo que fueron civiles armados los que llegaron en camionetas a sacar a los sacerdotes de sus iglesias. "Al padre Julio Norori, lo estaban esperando cuatro hombres de civiles" dijo un testigo a 100% Noticias.

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Las redes que demandan "Libertad Religiosa en Nicaragua" reportaron la noticia como: "Noche de cuchillos largos en Nicaragua contra la Iglesia Católica, Dictadura Sandinista manda a secuestrar por paramilitares a los sacerdotes Iván Centeno y Julio Norori" y más noche se conoció de la detención del padre Erick.

"Exigimos que respeten su integridad física y los liberen" demandaron. 

El régimen en Nicaragua ha mantenido una persecución feroz contra la iglesia católica en Nicaragua, mantienen preso al obispo Álvarez y ya rozan la docena de sacerdotes que mantienen en prisión.