La Prensa anuncia demanda ante la CIDH contra régimen en Nicaragua, por 32 millones de dólares

La Prensa de Nicaragua anunció que presentaron una demanda ante organismos internacionales, entre ellos la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), por el robo de las instalaciones del Grupo Editorial LA PRENSA por parte del régimen de Daniel Ortega, dicha confiscación provocó pérdidas por más de 32 millones de dólares.

En un artículo publicado en el sitio web del medio de comunicación informan que a mil días del robo los directivos del Grupo decidieron presentar una demanda ante la CIDH por las cuantiosas pérdidas económicas.

Señalan que en un nuevo recuento de las pérdidas, se agregó la suma de 11 millones de dólares de la demanda contra la Dirección General de Servicios Aduaneros (DGA), por los perjuicios provocados por la retención ilegal del papel entre septiembre de 2018 y febrero de 2020.

Aunque la demanda fue aceptada en los tribunales, el proceso no prosperó por la partidización de la Justicia.

Además señalaron el valor histórico incalculable por la pérdida de la hemeroteca y cuantiosos daños a más de cuatrocientos colaboradores del Grupo.

También señalan que hay daños que aún no se cuantifican, entre ellos el lucro cesante de los al menos mil días de uso de las instalaciones, que incluyen los inventarios en proceso que son los trabajos de los clientes de la imprenta que quedaron en el local al momento del robo.

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Al momento de la confiscación las instalaciones albergaban la Redacción, la rotativa, talleres, Imprenta Comercial, bodegas, hemeroteca, oficinas de los departamentos de Ventas, Circulación, Mercadeo, Contabilidad y Administración valoradas en más de 20 millones de dólares.

A este monto se suman más 2.27 millones de dólares por el valor del terreno donde están las instalaciones.

En el caso de la hemeroteca, La Prensa sostiene que a criterio de especialistas tiene un valor aproximado de medio millón de dólares, “un valor histórico incalculable, ya que reúne la colección de 96 años de publicaciones de LA PRENSA, pero también de todos los periódicos que existieron en el país en el último siglo, así como colecciones de revistas y fotografías”, refiere el medio.

En total cuantifican que el robo de las instalaciones supera los 32 millones de dólares.

Critican Centro Cultural José Coronel Urtecho

Tras el robo de las instalaciones, el régimen sandinista anunció que en el lugar funcionaría el Centro Cultural y Politécnico José Coronel Urtecho. Aunque el régimen dice que invirtió unos 9 millones de dólares en remodelaciones para echar a andar el Centro, este aún no funciona a su total capacidad.

“Mil días después del robo del plantel industrial donde por décadas se elaboró el diario LA PRENSA, la dictadura Ortega Murillo no ha logrado borrar la huella de la República de Papel, ni consolidar el Centro Cultural”, critican.

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Subrayan que aunque el régimen ha tratado infructuosamente de borrar 98 años de historia, sigue exhibiendo su fracaso, a través de los informes que publica sobre los estudiantes que se gradúan de sus cursos, e incluso en las fotografías muestran que no hay más de diez estudiantes en cada aula.

Respecto al juicio ilegal contra el gerente general del Grupo, Juan Lorenzo Holmann Chamorro, el medio señala que Ortega trató de disfrazar el robo de LA PRENSA como una acción derivada del juicio a Holmann, ya que la sentencia judicial dispuso que los bienes ocupados el 13 de agosto de 2021 se mantendrían bajo custodia. Es decir, un robo disfrazado de confiscación que además está prohibida en la Constitución.

“Holmann no era dueño de Editorial La Prensa, y la sociedad nunca fue mencionada en su juicio, sin embargo, en agosto de 2022, la Procuraduría General del régimen pasó la propiedad a nombre del Estado”, denunció.

En medio de las ilegalidades del régimen Ortega Murillo, LA PRENSA señala que Ortega no consiguió su objetivo, porque sin instalaciones, sin edición impresa y desde el exilio el Diario sigue informando a los nicaragüenses y al mundo los abusos que la dictadura comete en Nicaragua.