Fotoperiodista Oswaldo Rivas se exilia de Nicaragua, régimen le robó propiedades

El fotoperiodista nicaragüense, Oswaldo Rivas, relató en 100%Noticias que, el 8 de junio de 2024, se vio obligado a abandonar su país natal tras una intensa persecución que empezó en 2018 pero se profundizó este 2024.

Tras sostener una reunión, el 4 de junio, con un periodista francés en la catedral de Granada para documentar la represión nicaragüense contra los religiosos, el periodista gráfico que trabajaba como corresponsal gráfico de la Agencia Francesa de Prensa (AFP), se vio impedido a realizar su trabajo por una patrulla policial que lo vigilaba.

“Yo creo que ya me tenían controlado. Porque con el periodista francés no hicimos nada, solo nos reunimos y comimos y ya teníamos a la gente encima”, aseguró a 100% Noticias.

Según Rivas, un día después de este incidente, el 5 de junio, acudió al estadio nacional de fútbol para cubrir el partido de Nicaragua versus Montserrat, por las eliminatorias de la Concacaf 2026, pero recibió un mensaje de sus amigos que sería detenido esa misma noche y decidió quedarse hasta el final del partido, estuvo en una conferencia y luego se salió en dirección al baño para escurrirse entre la multitud y perderse de la vista de agentes de inteligencia militar y policial que lo andaban buscando.

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“Unos amigos me dijeron te van a capturar, te van a llevar al Chipote”, contó. La advertencia le llegó seguida de la evidencia que estaba rodeado por miembros de la inteligencia militar.

“Yo conozco bien el estadio de fútbol. Entonces lo que le hice fue la vuelta, me metí a la conferencia de prensa, después me fui al baño y después salí por la parte de atrás, donde está saliendo todo el grueso de los fanáticos”, recordó.

Rivas no pudo ir a su casa ya que le avisaron que su vivienda estaba vigilada y luego le informaron que fue tomada por asalto por la policía.

“Y ahí me quedé (en casa de amistades) al día siguiente llamé y me dijeron ni venga, hay tres patrullas en su casa y se metieron a su casa”, narra.

Por tres días, Oswaldo se escondió hasta huir de Nicaragua, mientras la policía realizaba interrogatorios a vecinos y a algunos familiares.

“Yo salí el 8 de junio por punto ciego hacia el norte y el día siguiente el 9, llegué a Estados Unidos”, rememora que evitó quedarse en Honduras por temor a ser devuelto a Nicaragua.

Periodismo en crisis

Oswaldo Rivas explicó que desde el 2018, el periodismo ha pagado caro informar desde Nicaragua, pues ha sido víctima de agresiones y robos por parte de policías y fuerzas paramilitares.

“También a mí me atropelló un paramilitar con una moto”, cuando estaba fotografiando el momento en que policías reprimían a un grupo de manifestantes. 

“En Diriamba, también ahí nos robaron equipos”, como respuesta del régimen de Daniel Ortega en un intento de callar a la prensa, analiza Rivas. “Para que la gente no se de cuenta de lo que pasa en Nicaragua”.

“Yo como fotógrafo quería estar adentro de Nicaragua, todavía, contar como inició una historia en el 2018 y, pues la quería terminar, pero a partir de ese momento nuestro trabajo se volvió muy difícil, muy complicadísimo diría yo y peligroso, muy arriesgado”, insistió.

Trayectoria

La trayectoria de Oswaldo Rivas es notable y diversa. Comenzó su carrera como fotoperiodista como corresponsal de guerra en 1987. Posteriormente, trabajó en el desaparecido diario La Tribuna. 

Desde 1997 hasta 2020, se desempeñó como fotógrafo para la agencia de noticias Reuters. Más recientemente, desde 2021 hasta hace unos días, trabajaba como corresponsal gráfico para la Agencia Francesa de Prensa (AFP).

Sin nada en el exilio

Para escapar al exilio, tuvo que perderlo todo, incluso su historia profesional. Rivas ahora busca como regularizarse en Estados Unidos, país de acogida.

“Me robaron la casa y me la vaciaron, a pesar de que está a nombre de mi esposa. Lo mismo pasó con los vehículos y solo uno de ellos estaba a mi nombre”, denunció.

Periodismo en Nicaragua

Nicaragua vive una profunda crisis de libertad de prensa. En 2024, la persecución a periodistas se intensificó, obligando a más de 26 periodistas a exiliarse en los primeros seis meses del año. Según la CIDH, el número total de comunicadores nicaragüenses en el exilio, desde 2018, supera los 263, A esto se le suman las detenciones, hostigamiento y cierre de medios.