Volcán Telica registra 126 explosiones; actividad de baja intensidad, según INETER

El Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER) reportó un total de 126 explosiones en el volcán Telica desde el pasado sábado. Esta información fue revelada este miércoles por Rosario Murillo, quien presentó un informe basado en los resultados de un monitoreo realizado por un equipo interinstitucional. 

La vicepresidenta sancionada explicó que el equipo utilizó drones equipados con sensores térmicos y cámaras de alta resolución para evaluar la actividad volcánica. Tras su evaluación, se concluyó que la actividad volcánica es de baja intensidad, lo que sugiere que no se prevé un aumento significativo en la misma.

Este equipo de trabajo estuvo compuesto por técnicos de la Unidad Municipal de Gestión de Riesgo de Telica, especialistas en medios no tripulados de la Defensa Civil, personal del Ministerio de Salud (MINSA), INETER y el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (SINAPRED). 

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De acuerdo con los resultados preliminares, la actividad volcánica se caracteriza por una incandescencia constante en el cráter principal y la expulsión de cenizas y bloques de roca, los cuales se han limitado a un radio de aproximadamente un kilómetro al suroeste del cráter. No se han registrado indicios de cambios importantes en la estructura interna del volcán, lo que apunta a la ausencia de eventos más complejos.

“Se identifica la dinámica actual del volcán Telica, explorando con medios aéreos no tripulados, con sensores; esos medios aéreos llevan sensores termográficos de alto alcance y cámaras de alta resolución térmicas y digitales. Durante los recorridos se observa un incremento de las temperaturas en los puntos de monitoreo constantes que realiza el Ineter", informó Rosario Murillo.
Asimismo, Rosario Murillo detalló que los drones utilizados durante el monitoreo cuentan con sensores termográficos de alto alcance y cámaras de alta resolución térmica y digital. Durante los vuelos, se registraron temperaturas de hasta 500ºC en el cráter principal, una incandescencia que ha permanecido constante desde diciembre de 2015. 

"Luego también se observa incandescencia en el cráter principal con temperaturas aproximadas a los 500 grados centígrados; esta incandescencia se ha mantenido desde diciembre del año pasado hasta la actualidad. Preliminarmente, se observa también que no existen cambios relevantes en la estructura volcánica, lo que podría ser un indicio de que no hay una actividad más compleja o de mayor riesgo", concluyó Rosario Murillo.