MERCADOS ABSORBEN A BARRIOS CAPITALINOS

Al menos 10 barrios han empezado a ser absorbidos por los principales mercados de la capital y, sin duda, el mercado Oriental es el de mayor voracidad, pues en los últimos 30 años se ha tragado los barrios Los Ángeles, Santo Domingo, el reparto Ciudad Jardín y en buena medida el barrio 19 de Julio.   El segundo mercado en crecimiento es el Iván Montenegro, que ya saltó la pista y se tragó la calle de Villa Bulgaria, que sigue la pista Buenos Aires, así como la calle frontal de Villa Venezuela y Las Américas 3. La señora Elizabeth Rugama Cruz, de Villa Bulgaria, quien tiene un negocio de venta de ropa, aseveró que tiene aproximadamente cuatro años en ese negocio y se defiende alquilando dos pequeños locales que son parte de su propiedad. “Alquilo allí donde funciona una zapatería y alquilo este otro espacio, además del mío donde vendo ropa. Usted sabe, uno tiene que defenderse y de esta manera lo hago. Soy fundadora de este barrio y antes aquí era puro monte, y  lo bueno es que tengo el mercado cerca”, alegó Rugama. Por su parte, Mariana Jiménez, de Pizza Loca, refiere que tener el mercado cerca es una ventaja para los pequeños negocios por la cantidad de personas que lo visitan, lo que hace de las calles aledañas una buena oportunidad para sus propietarios.

TAMBIÉN EL HUEMBES

Otro de los mercados en expansión es el Roberto Huembes, que ya cruzó fronteras y por el suroeste se mueve sobre el barrio Pantasma, por el sur comienza a entrar al barrio La Fuente y por el noreste se adentra por el reparto Santa Julia, en dirección a la colonia Nicarao. El cuarto mercado es el Israel Lewites, cuya expansión limita con parte del barrio Batahola y literalmente se ha tomado una de las paradas de buses del Centro Cívico, cerca del hospital Berta Calderón. El especialista en medioambiente y desarrollo urbano, arquitecto Romer Altamirano, revela que la expansión de los mercados está ligada con la falta de planificación municipal, pero también con la situación socioeconómica de la población. “Tiene que ver con la dinámica del comercio y la población aledaña, que instala pequeños negocios y crea una propiedad mixta, donde además de su comercio tiene su vivienda, o a veces las zonas habitacionales se transforman en zonas de comercio cuando el propietario vende su lote”, explicó el arquitecto. El especialista manifiesta que la municipalidad es la encargada de determinar los espacios que ocupa el comercio y da los permisos para el uso de suelo. Por tanto, Altamirano recomendó a la Alcaldía de Managua crear un plan de desarrollo a largo plazo y crear condiciones para la evolución del comercio en puntos específicos, de lo contrario el desorden cada día será peor.