Día Nacional del Periodista: La veracidad es un principio ineludible para el periodismo

Hoy, "Día Nacional del Periodista", es una ocasión para celebrar y alegrarnos, apartándonos del estrés inherente a esta hermosa y desafiante profesión. Es un momento propicio para la reflexión, para identificar vacíos y errores, y para buscar maneras de mejorar continuamente.

En el ejercicio del periodismo, la verificación de la información es crucial. Contrastar y confirmar datos con múltiples fuentes es la mejor práctica. La primacía de la rapidez no justifica caer en falacias o inexactitudes porque la verificación fehaciente de los hechos debe ser prioridad.

En este día especial, recordemos que la veracidad es un principio insoslayable para el periodismo ético. La libertad de expresión, de información y de prensa son derechos fundamentales que garantizan una sociedad democrática y pacífica, consagrados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en la Constitución Política de la República de Nicaragua.

La responsabilidad periodística se sustenta en la veracidad, cimiento de la ética profesional del periodista. Valores como honor, honestidad, deber, responsabilidad y conciencia son pilares fundamentales en la práctica del periodismo y la comunicación social.

La información no debe ser tratada como una mercancía, sino como un bien social. La misión principal del periodista y los medios de comunicación es informar y educar basados en la veracidad, actuando éticamente y en servicio de la sociedad, en apego a las leyes y derechos humanos.

Promover el respeto a la vida privada, dignidad humana y derechos individuales es esencial. Presumir la inocencia, evitar incriminaciones en entrevistas, y proteger la identidad de menores en situaciones legales son prácticas éticas ineludibles.

El periodismo debe respetar y promover los derechos humanos en todas sus dimensiones, fomentando la equidad y el respeto a la diversidad. Evitar instigar violencia, denunciar ilícitos que perjudiquen a la sociedad, y respaldar a niños y adolescentes ante violaciones a sus derechos son deberes ineludibles para un periodismo responsable y ético.