Daniel Ortega se solidariza con Putin por un "infame" ataque contra el Kremlin
El presidente de NicaraguaNicaragua, Daniel Ortega, se solidarizó este jueves con su homólogo ruso, Vladímir Putin, tras el "infame ataque perpetrado" ayer con drones contra el Kremlin.
"Con el afecto y la admiración de siempre, en estos días históricos de celebración de las victorias sobre el nazismo, estos días que también son de lucha contra los mismos enemigos de la humanidad, saludamos a usted condenando el infame ataque perpetrado el día de ayer por autores que se conocen, contra las instalaciones del Kremlin", escribió Ortega a Putin en una carta.
"Nuestra condena es también una condena contra todas las formas de terrorismo y contra el fascismo que se ha venido reproduciendo como el mal, amenazando a pueblos grandes y libres como su pueblo", agregó el mandatario nicaragüense.
Ortega dijo estar seguro "de que los enemigos de la familia humana no prevalecerán, como tampoco pudieron alzarse con triunfos en las batallas en las que millones de familias soviéticas vivieron el sacrificio supremo y la gloria de las victorias que en estos días se ratifican, con la mejor voluntad y compromiso".
"Por la paz, el derecho a la libertad, el bienestar, y el bien común en el mundo", continuó Ortega, quien suscribió la carta junto a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Putin volvió hoy a su despacho tras el ataque con drones perpetrado la víspera contra el Kremlin, del que Moscú acusa directamente a Kiev. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, negó cualquier vinculación, aduciendo que Kiev sólo se defiende y no apunta contra objetivos en territorio ruso.
El Kremlin acusó este jueves a EE.UU. de estar detrás del ataque y de otros atentados en territorio ruso, lo que Washington ha negado categóricamente.
Nicaragua y Rusia, que establecieron sus relaciones diplomáticas desde 1944, fortalecieron los lazos y la cooperación bilateral tras el retorno al poder de Ortega y los sandinistas en 2007.
Rusia es un antiguo aliado de Nicaragua que durante el primer Gobierno sandinista (1979-1990) dotó de armamento soviético a las Fuerzas Armadas nicaragüenses.
Nicaragua es uno de los contados países, junto a Venezuela y los pequeños Estados insulares de Nauru y Tuvalu, que se sumaron a Rusia en el reconocimiento de la independencia de las regiones separatistas georgianas de Abjasia y Osetia del Sur, y que ha recibido a altos funcionarios rusos desde que el gigante euroasiático invadió Ucrania.