Víctimas de represión proponen "Grupo Amigos de Nicaragua" en Cumbre UE-CELAC
A tres días de arrancar la Cumbre Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Bruselas, 160 víctimas de represión del régimen de Daniel Ortega y 29 organizaciones, propusieron la creación de un “Grupo de Amigos del Pueblo Nicaragüense” para que garantice una respuesta multilateral, ante la grave crisis de derechos humanos y humanitaria en Nicaragua.
En la carta los firmantes solicitan que se priorice la situación en Nicaragua “Esperamos que la Cumbre sea una oportunidad para discutir desafíos apremiantes en materia de derechos humanos en países de Europa y América Latina y el Caribe, como el retroceso democrático, la violencia e inseguridad y los abusos contra migrantes y solicitantes de asilo”, reza la misiva.
Señalan que Nicaragua registra un grave deterioro de los derechos humanos que incluye ataques sistemáticos a los medios de comunicación independientes, el desmantelamiento de la sociedad civil y la consolidación de un régimen autoritario.
En este sentido, en la misiva destacan el informe del Grupo de Expertos en Derechos Humanos de las Naciones Unidas sobre Nicaragua (GEDHN) que concluyó que existen motivos razonables para creer que las autoridades nicaragüenses han cometido crímenes de lesa humanidad, incluyendo asesinatos, encarcelamientos, torturas, violencia sexual, deportaciones y persecución por motivos políticos.
Presos políticos
Asimismo, las víctimas de la represión informaron que 64 personas permanecen detenidas arbitrariamente, 317 críticos fueron despojados de su nacionalidad y bienes.
Respecto al espacio cívico denunciaron la cancelación de la personería jurídica de más de 3.500 organizaciones no gubernamentales desde 2018.
También resaltan la persecución a la Iglesia Católica, sacerdotes y obispos, incluyendo a monseñor Rolando Álvarez, quien fue condenado arbitrariamente a 26 años de prisión.
“No se ha permitido el ingreso de observadores internacionales al país desde que el gobierno expulsó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos a finales de 2018”.
Piden mayor efectividad
Por otro lado, lamentan que la respuesta de la comunidad internacional ha carecido hasta ahora de la coordinación y el alineamiento necesarios para contribuir de manera efectiva a que se adopten pasos para la transición hacia una democracia fundada en la libertad y los derechos humanos.
Por eso, instaron a los gobiernos de América Latina, a la UE y a sus Estados miembros, a establecer un “Grupo de Amigos del Pueblo Nicaragüense” integrado por gobiernos de todo el espectro político, para contribuir a una transición democrática.
Según los firmantes, el grupo debería celebrar reuniones de alto nivel para diseñar una estrategia de acciones pacíficas, públicas y privadas, para buscar la liberación de los presos políticos, la justicia y la reparación para las víctimas de la represión y la realización de elecciones libres y justas.
Recuperar la democracia
Por su parte, el excarcelado y desterrado político, Félix Maradiaga, agradeció a las 160 víctimas nicaragüenses que firmaron la iniciativa junto a otras 29 organizaciones de derechos humanos.
Explicó que la conformación del ‘Grupo de Amigos del Pueblo Nicaragüense’ ayudaría a acompañar una serie de acciones y de estrategias para lograr la Libertad de los presos políticos, así como procesos de justicia y reparación para las víctimas. “El objetivo fundamental es aumentar la presión global para obtener democracia y Libertad".
Asimismo, Maradiaga indicó que en las reuniones sostenidas coinciden que la crisis en Nicaragua requiere de acciones más contundentes, que tomen como referencia el informe del grupo de expertos de la ONU.
Juan Sebastián Chamorro, excarcelado político desterrado a Estados Unidos, aseguró que la carta está “dirigida a los representantes que irán a la cumbre UE-CELAC, solicita coordinar acciones al más alto nivel para denunciar los abusos de DH. Unión en acción”.
La carta fue firmada por nicaragüenses en el exilio, expresos políticos, defensores de los derechos humanos. Además, cuenta con el apoyo de 20 organizaciones nicaragüenses y 9 organizaciones internacionales y regionales de derechos humanos.
Maradiaga y Chamorro son parte de los firmantes de la carta, así como los escritores Sergio Ramírez Mercado, Gioconda Belli. También los periodistas Carlos Fernando Chamorro, Lucía Pineda Ubau, Wilfredo Miranda, Jennifer Ortiz, Cindy Regidor, Tiffany Roberts, Aníbal Toruño, Elmer Rivas, Carlos Salinas, Luis Galeano y David Quintana.