Violeta Chamorro, la primera presidenta electa en América, cumple en Costa Rica 95 años
La expresidenta de Nicaragua Violeta Barrios de Chamorro, la primera jefa de Estado elegida democráticamente en América y la mujer que derrotó en las urnas al exguerrillero sandinista Daniel Ortega en 1990, cumple este viernes en Costa Rica 95 años, un país al que fue trasladada hace un año por su delicado estado de salud para ser cuidada por sus hijos desterrados.
Nacida el 18 de octubre de 1929 en la ciudad de Rivas, en el Pacífico sur de Nicaragua, Violeta Barrios Torres, conocida como Violeta Chamorro por el primer apellido de su esposo, el periodista Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, cumple 95 años enferma pero estable, tras sufrir hace seis años un accidente cerebrovascular.
Hace un año, antes de ser trasladada por vía aérea desde Managua hasta San José, había permanecido en su residencia, en el barrio Las Palmas, en la capital nicaragüense, "bajo el cuidado y el amor de su familia, acompañada por personal de salud especializado", de acuerdo con la familia Chamorro Barrios.
La familia explicó entonces que a partir de octubre de 2023, "doña Violeta" se establecería en San José "bajo el cuidado y el amor de su familia, con el acompañamiento de personal de salud y médicos especializados".
Con el 54,7 % de los votos, Chamorro (1990-1997), viuda del también héroe nacional Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, venció en las elecciones del 25 de febrero de 1990 al sandinista Daniel Ortega, que buscaba entonces la reelección y quien desde 2007 es nuevamente presidente de Nicaragua.
Al derrotar de forma sorprendente a Ortega, cuando se presentó como candidata a la Presidencia por una extinta coalición de 14 partidos que conformaron la Unión Nacional Opositora (UNO), se convirtió en la primera mujer presidenta de Nicaragua y del continente americano electa por voto popular.
"Doña Violeta", como cariñosamente es llamada, se casó en 1950 con Chamorro Cardenal, asesinado el 10 de enero de 1978 en las calles de Managua por sicarios pagados por el régimen del derrocado presidente Anastasio Somoza Debayle.
Su legado: la pacificación y reconciliación
Durante su mandato de seis años y ocho meses, Chamorro logró la reconciliación de un país devastado por la guerra civil de la década de 1980; encauzar la nación hacia el crecimiento económico, reducir la pesada deuda exterior e impulsar la profesionalización de las Fuerzas Armadas y Seguridad.
El principal logro de Chamorro durante su gestión de Gobierno fue el proceso de pacificación y reconciliación entre los nicaragüenses, que en la década de 1980 se enfrentaron en una guerra civil que dejó 50.000 muertos.
Como un ejemplo al resto de la sociedad nicaragüense, Chamorro unió a su familia, dividida en sandinistas y antisandinistas: el hijo mayor, Pedro Joaquín, fue miembro del directorio de la extinta 'Contra' antisandinista, mientras que el menor de los cuatro, Carlos Fernando, dirigió hasta 1994 el diario Barricada, propiedad del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Sus dos hijas también estuvieron en los planos opuestos de la política, ya que Claudia Lucía trabajó como embajadora del régimen sandinista en Costa Rica, mientras que Cristiana apoyaba desde la dirección de las páginas del diario La Prensa a las fuerzas políticas contrarias al FSLN.
"La patria que heredé era una sociedad desgarrada por la división. Los nicaragüenses no nos reconocíamos como hijos de una misma patria. Podían más los intereses partidarios y personales que los legítimos intereses del pueblo", reflexionó en sus memorias 'Sueños del corazón. La autobiografía de una mujer excepcional'.
En su libro, publicado en 1997, la expresidenta asegura que sintió "una gran angustia" en su corazón "al recibir un país en guerra y destruido".
Tres de sus hijos están exiliados y desnacionalizados
De los cuatro hijos de la expresidenta, su hija Claudia Lucía es la única que no ha sido desnacionalizada.
Su hijo mayor, Pedro Joaquín, fue excarcelado y expulsado hacia Estados Unidos el 9 de febrero de 2023, junto a otras 221 personas, incluyendo su hermana CristianaCristiana.
Cristiana, que aspiró a ser candidata presidencial por la oposición y tenía mayor probabilidad de derrotar al Ortega en los comicios de noviembre de 2021, al igual que lo hizo su madre en 1990, a diferencia de su hermano mayor que se quedó en EE.UU., ella decidió hacerlo en Costa Rica, como otros tantos nicaragüenses.
Su otro hermano, el reconocido periodista Carlos Fernando, director de Confidencial y de los programas Esta Semana y Esta Noche, también reside en Costa Rica desde junio de 2021.
"Doña Violeta", que en 1958 se marchó al exilio a Costa Rica junto a su marido, y que formó parte de la Junta de Gobierno entre 1979 y 1980, reside desde hace un año en San José, está vez para estar bajo el "cuidado y amor" de dos de sus hijos.