Opositores nicaragüenses anularán Constitución Política aprobada por Ortega, cuando caiga dictadura
La Concertación Democrática Nicaragüense (CDN-Monteverde) aseguró que, en un futuro gobierno democrático, eliminarán la Constitución de corte totalitario impuesta por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Además, promoverán una Asamblea Constituyente que permita al pueblo nicaragüense participar activamente en la creación de una nueva Constitución, mediante un proceso de consulta ciudadana que represente las aspiraciones y necesidades de todos los sectores del país.
Durante una conferencia virtual, el opositor Juan Sebastián Chamorro señaló que la actual Constitución es ilegítima tanto por su aprobación a través de una Asamblea Nacional controlada por la dictadura, como por la ausencia de una consulta al pueblo. Chamorro calificó este texto como una "aberración constitucional" que viola la autodeterminación del pueblo y comparó la situación con la de Venezuela.
“Sobre esta aberración de Constitución hemos querido resaltar un elemento fundamental, que es la violación a la autodeterminación de el pueblo (...). No ha sido consultado el pueblo nicaragüense y por esa razón sigue y continúa y tiene más elementos de nulidad, entonces lo que nos lleva a que en un eventual proceso electoral democrático participativo producto de reforma electoral producto de un cambio democrático tiene que haber una Constituyente para llevarle el texto al pueblo nicaragüense, que sobre este texto haga sus debidas consideraciones y cambios a través de una consulta ciudadana a través de una consulta en todo el país de lo que debe ser la Constitución”, expresó.
Chamorro destacó que, en un eventual proceso democrático, será necesario reformar profundamente las estructuras políticas y legales del país, y subrayó que esta Constitución debe ser reemplazada por una que se elabore en un contexto de paz y democracia, alejándose de las imposiciones que marcaron la de los años 80.
“Por primera vez en muchos años que se redacte una Constitución que sea en paz, en democracia y no la de los 80 que se hizo en un contexto de una guerra y con muy poca participación y con mucha gente obviamente frente a una guerra civil”.
Una Asamblea Constituyente inclusiva
Eliseo Núñez, abogado y miembro de la oposición, insistió en que una transición democrática no puede basarse en las reglas actuales. "Lo peor que podemos hacer es operar bajo la misma Constitución bicéfala que otorga poderes desproporcionados al Ejecutivo", explicó.
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Agrega “Esta Constitución como está construida, aunque en el poder esté un presidente desde el signo contrario a Ortega tiene que ser reformada y cambiada profundamente y eso solo se puede hacer mediante una Asamblea Nacional Constituyente por la participación de la gente es decir, esta no es una propuesta de diálogo para decirle a Ortega vamos a dialogar y vamos a una Constituyente no es eso es simplemente el contraste de lo que se debe de hacer cuando la transición política se consiga”, aclaró Núñez.
María Laura Alvarado, también integrante de la CDN, destacó la importancia de incluir a todos los sectores del país en el proceso constituyente, como mujeres, campesinos, estudiantes, empresarios y juventudes, para asegurar que el nuevo texto refleje las necesidades y expectativas de toda la sociedad. "La Constitución debe regir cómo funciona el Estado y establecer reglas claras para garantizar los derechos y libertades de todos los nicaragüenses", afirmó.
Denuncias contra la dictadura
La CDN también advirtió que la nueva Constitución, aprobada en una Asamblea Nacional ilegítima, viola la Constitución vigente y es ilegal e inconstitucional. Según el pronunciamiento, esta reforma concentra todo el poder en la familia Ortega-Murillo, suprime el Estado de derecho y busca perpetuar una sucesión dinástica.
“El régimen ha convertido a Nicaragua en un estado forajido que viola el derecho internacional y sus propios compromisos democráticos”, señala el comunicado. Ante esta situación, la CDN reafirmó su compromiso de trabajar junto al pueblo nicaragüense, tanto dentro como fuera del país, para debilitar los pilares de la dictadura y abrir el camino hacia una transición democrática.
Medidas internacionales
La agrupación política subrayó la necesidad de profundizar el aislamiento del régimen y presionar para que se implementen sanciones más severas. Estas medidas deben paralizar las operaciones del régimen, congelar sus fuentes de financiamiento y frenar su enriquecimiento ilícito.
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Asimismo, propusieron que, una vez lograda la transición, se convoque a elecciones libres y transparentes para elegir una Asamblea Nacional Constituyente con participación de todas las fuerzas políticas. Esta Asamblea redactaría una nueva Constitución que sería sometida a referéndum, devolviendo así al pueblo su derecho a decidir sobre su futuro político y social.