Régimen en Nicaragua ejecutará "acciones necesarias" para garantizar que EEUU cumpla fallo de la CIJ
La Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó este martes en segunda legislatura enmiendas a la Constitución Política, en la que ordena al Estado ejecutar las "acciones necesarias" para hacer cumplir un fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Estados Unidos, por el que Managua reclama una indemnización de más de 12.000 millones de dólares.
"Nicaragua reitera la plena validez y fuerza legal de todas y cada una de las consideraciones y resoluciones emitidas por la Corte Internacional de Justicia, de La Haya, en su histórica sentencia del 27 de junio de 1986 sobre las 'Actividades militares y paramilitares en y contra de la República de Nicaragua', en concordancia con el derecho internacional y la legislación nicaragüense", establece el artículo incorporado en la Carta Magna y aprobado por unanimidad por los diputados.
"El Estado de Nicaragua tiene el derecho de ejecutar las acciones necesarias para garantizar el pleno cumplimiento de esta histórica sentencia", agrega.
El Gobierno que preside Daniel Ortega reclama a EE.UU. una antigua indemnización, superior a los 12.000 millones de dólares, por los daños causados al financiar la guerra interna en el país centroamericano en la década de 1980.
La reclamación de la indemnización, ordenada el 27 de junio de 1986 en una sentencia de la CIJ, fue abandonada por Nicaragua oficialmente en 1991, pero el Gobierno sandinista ha insistido en cobrarla.
En junio de 2023, Ortega presentó un reclamo por incumplimiento al secretario general de la ONU, António Guterres, en el marco del 37 aniversario de esa sentencia del máximo tribunal de las Naciones Unidas.
Desde 1991 Estados Unidos ha dado por cerrado el caso de la indemnización, que en 38 años únicamente ha sido reclamada por Ortega.
El 27 de junio de 1986 la CIJ condenó a Washington por los ataques con explosivos contra puertos y otras instalaciones de Nicaragua, realizados en plena guerra civil y financiados por EE.UU., por lo que el país norteamericano fue condenado a pagar una millonaria indemnización.
Reforma proscribe el uso de armas nucleares y los "traidores a la patria"
Durante la sesión de este martes, el Parlamento nicaragüense también definió en la reforma a la Constitución que "la independencia, la soberanía, la autodeterminación nacional, la seguridad y la paz son derechos irrenunciables del pueblo y fundamentos de la nación nicaragüense", y los que atenten contra ella serán considerados "traidores a la patria".
"Toda injerencia extranjera en los asuntos internos de Nicaragua o cualquier intento de menoscabar esos derechos, atenta contra la vida del pueblo. Es deber de todos los y las nicaragüenses preservar y defender estos derechos Por consiguiente, todos aquellos o aquellas que atenten contra esos sagrados derechos del pueblo nicaragüense serán considerados traidores a la patria", señala la norma constitucional.
Además, estableció que Nicaragua fundamenta sus relaciones internacionales en el respeto, amistad, complementariedad y solidaridad entre los pueblos y la reciprocidad desde la soberanía de los Estados, y que el país se adhiere a los principios del Derecho Internacional reconocido y ratificado soberanamente.
Por tanto, se inhibe y proscribe todo tipo de agresión política, militar, económica, cultural y religiosa, así como la intervención en los asuntos internos de otros Estados.
También reconoce el principio de solución pacífica de las controversias internacionales por los medios que ofrece el Derecho Internacional y proscribe el uso de armas nucleares y otros medios de destrucción masiva en conflictos internos e internacionales; asegura el asilo para los perseguidos políticos y rechaza toda subordinación de un Estado respecto a otro.
Asimismo, consigna que ninguna medida violatoria del Derecho Internacional tomada por Estados, grupos de Estados o gobiernos extranjeros en contra de instituciones, funcionarios y/o personas nicaragüenses tendrá validez para el Estado nicaragüense, que tiene el derecho de tomar las medidas que sean necesarias para proteger su soberanía nacional.
Por otro lado, la reforma constitucional establece también que "Nicaragua privilegia la integración regional y propugna por la reconstrucción de la unidad centroamericana" y que trabaja "por la construcción de la Gran Patria Latinoamericana y Caribeña, basada en los ideales unitarios y de hermandad de Bolívar y Sandino".