Juramentan a otros 1,400 paramilitares como "policías voluntarios" en Ocotal, Nicaragua
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo continúa expandiendo su fuerza policial de encapuchados con la juramentación de más de 1,400 nuevos "policías voluntarios" en la ciudad de Ocotal, departamento de Nueva Segovia, según informó este mediodía Rosario Murillo.
"Más de 1 mil 400 policías han sido juramentados este día, en esa inmortal ciudad de Ocotal, donde nuestro general Sandino vibró con el Ejército defensor de la soberanía nacional de nuestra Nicaragua, la gloriosa batalla de Ocotal", afirmó Murillo quien exalta a los paramilitares.
Murillo destacó que la jornada de juramentación que se prolongará hasta el 26 de febrero estuvo enmarcada en un acto de homenaje al poeta Rubén Darío y a todas las familias nicaragüenses. "Nos sentimos y nos sabemos llenos de fortalezas, de luz, vida, verdad, esperanzas invictas", expresó en su intervención.
La nueva policía voluntaria paramilitar
La Policía en Nicaragua, bajo la dirección del sancionado, primer comisionado Francisco Javier Díaz Madriz, presentó a los nuevos efectivos, quienes formarán parte de la "Policía Voluntaria Comandante Julio Buitrago Urroz", un cuerpo de seguridad auxiliar.
Según el régimen, estos parapoliciales tienen "el compromiso de apoyar la defensa de la paz, la soberanía y la tranquilidad de las familias nicaragüenses". El director general de la Policía Nacional subrayó que la institución continúa con el proceso de juramentación en todo el país, "destacando la importancia de defender lo que consideró la "sacrosanta paz" que tanto promovió Rubén Darío.
Críticas por los paramilitares encapuchados
Sin embargo, esta iniciativa también generó fuertes críticas en varios sectores de la sociedad, especialmente debido al uso de capuchas por parte de los nuevos agentes. El hecho de que los "policías voluntarios" porten mascarillas o pasamontañas, una práctica reservada en el pasado para unidades especiales como la policía antidrogas, genera controversia, ya que muchos ciudadanos temen que este anonimato les otorgue una "licencia para delinquir".
Desde el ámbito de los derechos humanos, organizaciones como el Colectivo de Derechos Humanos "Nicaragua Nunca Más" expresaron su preocupación por esta medida.
Juan Carlos Arce, defensor del colectivo, instó a la población a identificar a los nuevos policías voluntarios para que, en caso de violaciones a los derechos humanos, puedan ser responsabilizados ante la justicia.
En una entrevista con la periodista Lucia Pineda Ubau de 100% Noticias, Arce calificó la juramentación como un intento deliberado del régimen para exhibir su poder y generar temor entre la población. "No cabe duda de que Ortega busca instaurar una tercera fuerza armada para intimidar al pueblo", afirmó.
Cuerpo policial ilegal y arbitrario
Arce también destacó que este cuerpo de seguridad, al operar fuera del marco legal, es un "cuerpo ilegal y arbitrario" que carece de legitimidad y transparencia. Señaló que, aunque no se sabe el costo exacto de mantener estas fuerzas, es la población la que termina financiando su funcionamiento. Según los críticos, este tipo de medidas refuerza el control del régimen sobre la sociedad, creando un clima de miedo y represión.