El 62,8 % de trabajadoras de hogar en Quito están empleadas informalmente, según estudio
"El no estar asegurada no solo afecta en el corto plazo. El efecto también se produce a futuro, en la jubilación, pues estas mujeres no percibirán pensiones por los años trabajados", aseveró Alejandra Andachi
El 62,8 % de las trabajadoras del hogar en Quito que reciben remuneración se encuentra en la informalidad, sin cobertura de la seguridad social, frente al 41 % que existía en 2018, lo que evidencia un creciente mercado informal en el que se vulneran los derechos laborales de cientos de empleadas, según un reciente estudio de la organización alemana Friedrich-Ebert-Stiftung (FES) en Ecuador.
Las economistas Alejandra Andachi y Micaela Guanoluisa elaboraron, con la colaboración de la Universidad Central del Ecuador (UCE), esta investigación titulada ‘Vínculos laborales y emocionales: navegando el vaivén de la realidad de las trabajadoras remuneradas del hogar', que analiza datos desde 2018 y hasta 2022.
"El no estar asegurada no solo afecta en el corto plazo. El efecto también se produce a futuro, en la jubilación, pues estas mujeres no percibirán pensiones por los años trabajados", aseveró este miércoles a EFE Alejandra Andachi.
El problema - aseguró - radica en la “falta de un contrato que formalice la relación laboral”, lo que conlleva la pérdida de derechos, como no tener vacaciones o no recibir el decimotercer y decimocuarto sueldo (sueldos extra).
Andachi subrayó que uno de los principales hallazgos del estudio es que la “intimidad y familiaridad que se generan entre empleadas y empleadoras”, sumado a sentimientos de “inferioridad”, “culpa” o “vergüenza”, que impiden a las trabajadoras reivindicar su derechos, lo que da pie a abusos laborales y psicológicos.
Impacto de la covid-19
Según Andachi, la covid-19 agravó aún más la situación porque las trabajadoras domésticas, según explicó, se vieron perjudicadas por la Ley Orgánica de Apoyo Humanitario (LOAH) de 2020 para combatir la crisis sanitaria.
“Se suponía que esta ley iba a ayudar, pero perjudicó porque daba al empleador recursos jurídicos para bajar las horas de trabajo a empleadas”, agregó.
De hecho, en 2022, el 58 % de las empleadas domésticas trabajó menos de la jornada legal, un 9 % trabajó más de la jornada legal y apenas un 33 % contaba con una jornada legal, según datos de la Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu).
Ante esta circunstancia, Andachi relató que cada vez son más las mujeres que deciden abonar por su cuenta la afiliación voluntaria que tiene un costo de 70 dólares mensuales.
Llamado a la sindicalización
En 2022, aproximadamente el 96,5 % de este mercado laboral en la capital ecuatoriana fue conformado por mujeres. Y de este porcentaje, el 46,8 % alcanzó a estudiar la secundaria, según datos de Enemdu, que recoge el estudio.
De acuerdo con esta misma encuesta, en 2022, el 74 % de las trabajadoras remuneradas del hogar percibían ingresos por debajo del salario básico unificado, y apenas el 3,7 % de ellas podía cubrir con su salario el costo de la canasta básica durante ese periodo.
Desde la organización alemana FES en Ecuador hacen un llamado a que las trabajadoras domésticas se empoderen y se sindicalicen para que conozcan y defiendan sus derechos laborales ante “la brutal maraña de explotación” a la que se enfrentan, concluyó Andachi.
Facebook
Visitar Facebook
X
Visitar X
Instagram
Visitar Instagram
Youtube
Visitar Youtube
LinkedIn
Visitar LinkedIn
WhatsApp
Visitar WhatsApp
Telegram
Visitar Telegram
Spotify
Visitar Spotify
TikTok
Visitar TikTok
Google Noticias
Visitar Google Noticias