Aunque el pedido de las autoridades es no acercarse a los colegios, quienes ya están en las instituciones deberán permanecer en esos lugares al resguardo de oficiales autoridades de cada institución, explicó el funcionario.
"Todos los estudiantes están a salvo", expresó en una ronda de prensa en la que dio detalles de por qué se tomó la drástica decisión.
Uno de los integrantes del directorio del Distrito Escolar Unificado de la ciudad recibió una amenaza genérica en la que advertía sobre la posibilidad de un ataque masivo contra un número no determinado de las 900 escuelas, en las que estudian 600 mil alumnos.
"Como superintendente, no voy a arriesgar la vida de ninguno de ellos", expresó Cortines.
INFOBAE