Otro nicaragüense pierde la vida en EEUU tras un año de emigrar

El joven Antonio Medina Castillo, originario de Quilalí, Nicaragua, fue encontrado sin vida en Cincinnati, Estados Unidos, en horas de la mañana del sábado 2 de septiembre. Aunque aún no hay dictamen forense, se presume que falleció de un infarto.

En 2022, Medina Catillo había emigrado tras el sueño americano al igual que miles de connacionales con el deseo de sacar adelante a su familia.

De acuerdo con el organismo pro migrantes Texas Nicaraguan Community (TNC) en lo que va del presente año han documentado la muerte de al menos 85 nicaragüenses en EEUU, sin embargo, esta cifra podría ser mayor ya que algunas familias prefieren no reportar su situación.

Para algunos estas muertes son una clara alerta porque las víctimas son connacionales recién llegados, usuarios atribuyen que sucede porque muchos de los fallecidos no se han adaptado a las nuevas temperaturas ni a las condiciones actuales. “Están mal alimentados, estresados y la vida lejos de casa no es fácil”, se lee entre las expresiones de redes sociales.

Otro caso: piden ayuda para repatriar cenizas 

Ana María López originaria de Ocotal, Nicaragua, despidió con tristeza a su hijo Raúl de 39 años de edad, quien decidió emigrar a Estados Unidos en junio de 2016. En agosto de ese mismo año, López no tuvo más noticias de su hijo y lo reportó como desaparecido. 

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Aunque pasaron siete años, Ana María no perdió la esperanza de reencontrarse con su hijo, y aún en cenizas, logrará darle cristiana sepultura. 

Un proyecto de identificación de Restos Humanos de la Universidad del sur de Texas y la organización Texas Nicaraguan Community, lograron que esta familia nicaragüense pusiera fin a su incertidumbre e identificaran los restos del joven migrante. 

La funeraria cobra $2,500 dólares por el traslado de las cenizas de Raúl hacia Nicaragua. La afligida madre pidió apoyo económico, el que pueden depositar en la cuenta Banpro 10021317815649 a nombre de Ana María López.