Sacerdotes costarricenses ofrecen misa por la situación que vive la iglesia católica en Nicaragua

A través de una asamblea extraordinaria la comunidad de obispos de la Conferencia Episcopal de Costa Rica convocó este viernes 12 de agosto a todas las parroquias en ese país a ofrecer las misas del próximo 15 de agosto, día en que se celebra la Asunción de la Virgen María, en favor de la iglesia en Nicaragua.

“Hemos dedicado parte de nuestra reflexión y oración por los acontecimientos que se viven en Nicaragua, especialmente en la Diócesis de Matagalpa. Rogamos al Señor para que pueda reinar la paz en esa nación; que la libertad religiosa pueda vivirse sin ninguna restricción y que la Iglesia siga llevando el anuncio de la Buena Noticia a todo el pueblo”, detalla parte de la misiva religiosa.

Por todos los acontecimientos suscitados recientemente en contra de la iglesia católica en Nicaragua, por parte del régimen de Daniel Ortega los religiosos costarricenses, aprovecharon la conmemoración de la asunción de la virgen María para pedir por Nicaragua.

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 “Por ese motivo, convocamos, de manera especial, en la Solemnidad de la Asunción de la Virgen María, a que todas las Eucaristías que este día, en todas las diócesis de Costa Rica, se ofrezcan en favor de la Iglesia en Nicaragua”, reza el comunicado oficial.

Asimismo, la misiva detalla que los obispos han solicitado que, durante esta fiesta mariana del 15 de agosto, conscientes de la profunda devoción que el pueblo nicaragüense profesa por la Madre de Dios, la iglesia en Costa Rica muestre su cercanía a través de la oración con los sacerdotes y jerarcas católicos de Nicaragua.

“Invitamos a los párrocos y sacerdotes en general a motivar a todos los fieles a celebrar esta Solemnidad de la Asunción orando por esta intención en favor de la Iglesia en Nicaragua”, agrega el comunicado.

De igual manera señalan que las principales rogativas que se ofrecerán por Nicaragua en cada misa y vigilia serán:

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“Que los creyentes nicaragüenses sigan confiando en la grandeza de Dios y continúen testimoniando el Evangelio en las condiciones de persecución que están enfrentando. Oremos. Por la Iglesia que vive en Nicaragua, para que la Asunción de María, primicia de la humanidad glorificada, les dé ánimo y fuerza para mantenerse fieles en medio de la persecución. Roguemos al Señor”.