Rosario Murillo justifica detención ilegal de Monseñor Álvarez y sacerdotes
Rosario Murillo leyó el comunicado de la policía sandinista justificando el secuestro de la Curia, repitiendo que "no recibieron comunicación positiva" del obispo para que saliera por su voluntad y que por eso allanaron
Rosario Murillo, quien usurpa la vicepresidencia de Nicaragua, justificó la detención de Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa y administrador de la diócesis de Estelí. La policía sandinista expresó en un comunicado que el obispo es investigado por “desestabilizadoras y provocadoras”.
Durante los 15 días que Álvarez permaneció sitiado en la Curia episcopal de Matagalpa, resistió con sacerdotes, seminaristas y laicos, cantando, rezando y predicando en las homilías transmitidas en facebook, pero el régimen lo acusa de organizar "grupos violentos", de crear "zozobra" e "incitar al odio".
Según Murillo la policía "hicieron lo necesario para custodiar, como corresponde a nuestra Policía Nacional, custodiar la paz, la seguridad y la tranquilidad de las familias nicaragüenses. Hicieron lo necesario al no recibirse ninguna comunicación positiva", justificó y esta vez evitó epítetos contra el obispo como en otras ocasiones.
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El ambiente en Matagalpa es tenso, tras el secuestro de Álvarez y sacerdotes. La mayoría del pueblo permaneció encerrado y oficiales de la policía todavía permanecían en las afueras de la curia episcopal que ahora quedó a cargo de Óscar Escoto, párroco de la iglesia Santa María de Guadalupe, quien era uno de los ocho acompañantes del obispo."Pendientes también de esa concordia, de esa tranquilidad que nos toca resguardar a cada uno de nosotros. Las familias nicaragüenses que queremos vivir en paz, tranquilos y fortalecer la cultura de encuentro. Seguir adelante, alcanzando, movilización y su labor pastoral en las diócesis de Matagalpa y Estelí" dijo Murillo, quien en su discurso de odio ha acusado a Monseñor de "crímenes de lesa espiritualidad". Un término que no existe en derecho canónico ni en el derecho penal.
Los detenidos por la policía sandinista este jueves, además de Álvarez, son: los sacerdotes José Luis Díaz y Sadiel Eugarrios, primer y segundo vicario de la catedral San Pedro, respectivamente; Ramiro Tijerino, rector de la Universidad Juan Pablo II y encargado de la parroquia San Juan Bautista; el sacerdote Raúl González; los seminaristas Darvin Leyva y Melkin Sequeira, el camarógrafo Sergio Cárdena.
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Según la policía el operativo "permitió recuperar la normalidad para la Ciudadanía y las Familias matagalpinas".
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