Informan de supuesta detención de asesino de Mulukuku de madre e hija

Familiares de Luz Maritza González y su hija Dayiris Boniche, confirmaron la detención de Wilmer Antonio González, señalado de haberlas asesinado en su finca en Mulukuku. Hasta el momento las autoridades de Nicaragua no se han pronunciado sobre la aprehensión de González Méndez quien pasó a engrosar la lista de los más buscados a nivel internacional por la policía INTERPOL por el doble homicidio y darse a la fuga.

Luz Maritza González y su hija Dayiris Boniche se instalaron desde finales de 2016 en una finca localizada en las afueras del municipio de Mulukuku, Caribe Norte de Nicaragua, la propiedad había sido una herencia de Gerónimo Gonzáles, padre y abuelo de ambas, respectivamente.

Las mujeres se enamoraron del campo y la joven Dayiris se reinventó a sí misma al tomar el mando de todas las actividades y aprendió todo lo que pudo de Wilmer Antonio González Méndez, un mandador de la finca que había crecido en la finca y según familiares don Gerónimo lo veía como un hijo.

Con la muerte del patriarca, González Méndez tomó el mando hasta entrenar a las nuevas propietarias de la finca y Dayiris aprendió todo lo respectivo al campo y en cuatro años no solo dominaba todas las labores del campo, lo había superado.

VER MÁS: Interpol circula al autor del crimen de madre e hija de Mulukukú

De los empleados de la finca el único que tenía acceso a la vivienda y a incidir en las mujeres era Wilmer Antonio González Méndez a quienes las mujeres le consideraban como parte de su familia.

Sin embargo, el 21 de julio la historia de estas mujeres cambiaría para siempre.

La versión oficial indica que Wilmer retiró de la finca con engaños a Luz Maritza y le disparó, mientras que la joven Dayiris fue ultrajada sexualmente y posteriormente asesinada en el interior de la finca.

Según testigos, Wilmer González huyó de la finca en un taxi con dirección a Siuna y todo este tiempo parecía que se lo había tragado la tierra, la familia de la víctima ofreció una elevada cantidad como recompensa a quien entregara al supuesto homicida, pero tampoco funcionó.