Analistas políticos aseguran que suspensión de relaciones diplomáticas con el Vaticano es una máscara, en el fondo es un “rompimiento”

Tras las contundentes declaraciones del Papa Francisco que calificó de “comunista, hitleriana y grosera” a la dictadura de Daniel Ortega, este último planteó la suspensión de las relaciones diplomáticas con el Vaticano. Al respecto, algunos analistas consideran que la confrontación entre la iglesia y el régimen ha alcanzado uno de los puntos más altos. Advierten de mayor represión contra el prelado. 

La socióloga e investigadora Elvira Cuadra asegura que la suspensión de relaciones diplomáticas con la Santa Sede es una máscara porque en el fondo es un rompimiento de las relaciones, lo cual es parte de la confrontación que mantienen con la Iglesia Católica en Nicaragua. 

“Han alcanzado uno de sus puntos más altos en el transcurso del 2022, vale la pena recordar que en el año 2022 iniciando febrero justamente expulsaron al representante del Vaticano y a partir de ahí se desencadenó una serie de ataques en contra de sacerdotes, templos religiosos y el cierre de varias radios hasta el momento en el que sitiaron al obispo Rolando Álvarez en Matagalpa, expresó.

La experta sostiene que la condena impuesta a Monseñor Rolando Álvarez fue lo que obligó al Vaticano a sentar una posición sobre la situación del obispo y de la Iglesia Católica en Nicaragua.

“El Papa Francisco se refirió al tema de manera muy directa y fuerte calificando al régimen como de una dictadura (....) evidentemente causó mucha molestia y ellos decidieron suspender las relaciones diplomáticas”, indica.

Asimismo señala que esta suspensión acentúa el aislamiento porque han cerrado las puertas a la comunidad internacional y ahora el Vaticano se agrega a la lista de estados con los cuales han roto las relaciones.

También el ex diputado opositor y analista político Eliseo Núñez considera que la decisión es un acto de soberbia, advierte que la represión contra el prelado aumentará. 

“Ortega y su señora no admiten ningún tipo de opinión en contra de ellos, ningún tipo de expresión, es una señal preocupante de que se va a ahondar la represión en contra de la iglesia católica y que van a buscar nuevos caminos para hacer sufrir al sacerdocio, para hacer sufrir al obispado y hay que estar alerta”.

Del mismo modo, la activista y defensora de derechos humanos, Haydee Castillo, coincide en que la decisión de suspender relaciones diplomáticas con la Santa Sede, es el resultado de una política de aislamiento. 

“Muestra la torpeza con la que están actuando porque los organismos, embajadas, estados que aún creían en la retórica del régimen o se mantenían con cierta reserva empezaron a perderle el respeto y a no darle ningún respaldo”, sostiene.

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Castillo observa que el régimen actúa con desesperación porque en el mediano plazo se está quedando sin oxígeno para continuar en el poder.

“Han quedado al desnudo como un régimen criminal, como un régimen que abortó completamente la democracia, el Estado de derecho, el orden constitucional que viola flagrantemente los derechos humanos”.

Llama a conformar mesa de concertación 

En este punto en el que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo están aislados políticamente, la activista Haydee Castillo lamenta que no exista un bloque de unidad por Nicaragua.

“No hay un bloque de oposición que capitalice al máximo semejante errores que está cometiendo el régimen sobre todo para encontrar una salida democrática a la crisis, una salida que no permita la repetición, una salida que nos brinde el acceso a la justicia tan esperada por el pueblo de Nicaragua”, apuntó.

También señala que es necesaria una “tregua” en la oposición para dejar a un lado la descalificación “aprovecho esta oportunidad para pedirle a todos los actores de oposición que este es el momento más importante para hacer una tregua a la descalificación y al fuego enemigo entre la oposición y avanzar a una gran mesa de concertación basada en lo que nos une para presentar un plan de nación y un liderazgo probó que le dé esperanza al pueblo de Nicaragua”.