Confiscación del INCAE confirma que Daniel Ortega es “enemigo” del pensamiento y ahuyenta la inversión
La decisión de cancelar la personería jurídica del INCAE y la confiscación de sus bienes en NicaraguaNicaragua, confirma que Daniel Ortega es “enemigo” del pensamiento, desarrollo y educación en el país, señalan analistas y opositores.
El analista político y economista Enrique Sáenz dijo a 100%Noticias que Daniel Ortega y Rosario Murillo son “dementes peligrosos” porque están claros de que su destino es el basurero de la historia, por lo cual buscan ocasionar el mayor daño posible al pueblo nicaragüense.
“El zarpazo al INCAE confirma que son enemigos del conocimiento, son enemigos del desarrollo del país, son enemigos de la educación de la juventud nicaragüense y lamentablemente, hay que decir ni siquiera en la década de los 80, el gobierno de ese momento se atrevió a tocar al INCAE”.
También señaló que Ortega forjó su alianza con la cúpula del sector empresarial precisamente en eventos auspiciados por el INCAE.
“Es una demostración más que al frente de este régimen hay una pandilla mafiosa irracional. Realmente no tienen límite y precisamente estos zarpazos son una evidencia que ellos saben que el destino que tienen es el basurero de la historia y en consecuencia mientras llegan a instalarse en el basurero de la historia están provocando todos los daños posibles”.
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Asimismo, el analista político explicó que estas confiscaciones impondrán una nueva carga hacia el futuro del pueblo nicaragüense.
“Estas confiscaciones tienen otra cara porque cuando salgamos de la dictadura todos los afectados tendrán que ser reivindicados sus bienes, realmente una herencia nefasta. Los nicaragüenses seguimos pagando el costo de los abusos de la década de los 80 y ahora están imponiendo una nueva carga hacia el futuro del pueblo nicaragüense, precisamente esa es una evidencia más de que su destino es el basurero de la historia”.
De igual forma, Kitty Monterrey, representante del cancelado partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), lamentó la cancelación de INCAE.
“El cierre y confiscación de la Sede del INCAE en Nicaragua es una agresión a todos los centroamericanos y profundiza el aislamiento de nuestro país. Los nicaragüenses condenamos este nuevo ataque contra la educación de calidad y nos solidarizamos con la comunidad incaista”.
También el excarcelado político Juan Sebastián Chamorro señaló que la dictadura pasó la factura a INCAE por su posición coherente de buscar una solución a la crisis desde el 2018.
“La cancelación INCAE no cae como una sorpresa, ya lo estábamos esperando, quisiera recordar las palabras del rector que nos dio aquella mañana del 27 de febrero del 2019 donde iniciamos la segunda mesa de negociación en la cual decía su rector Enrique Bolaños de que esta secuencia de tragedia en Nicaragua, lo que genera es pobreza y más pobreza y ahora estamos viendo de que esta institución básicamente la dictadura le pasa la factura por su papel en la segunda mesa de la negociación y también por haber protegido a los estudiantes”, expresó.
Agrega “Una casa de estudio de mucha importancia fundada a instancia del presidente John F. Kennedy con la Universidad de Harvard y liderazgos empresariales de todo Centroamérica eliminada por un decreto ministerial (...) afortunadamente el INCAE había tomado previsiones, ya había trasladado la mayor parte de su operación a Costa Rica precisamente por todas estas tragedias que mencionaba el rector iba a continuar trabajando, pero es una barbaridad un abuso más de la dictadura una barbarie que se hayan robado el Incae”.
Régimen de carácter autoritario
Por otro lado, el catedrático Alberto Cortes de la Universidad de Costa Rica (UCR), señaló que la confiscación del INCAE ratifica el carácter autoritario y despótico de la dictadura Ortega Murillo en Nicaragua.
“Se ve como un evento grave, como una acción más en la línea de atacar a las universidades y a las instituciones de educación superior, es un ataque también a la libertad de pensamiento, a la libertad de cátedra y por tanto una acción que ratifica el carácter autoritario y despótico que tiene la dictadura de Ortega y Murillo, con esto serían ya casi 30 instituciones de educación superior que se han cerrado en Nicaragua”, manifestó a 100%Noticias.
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Sostiene que la dictadura está destruyendo el tejido social nicaragüense “es una señal de una consolidación autoritaria en la región, es una muy mala señal porque sigue evidenciando que los regímenes autoritarios están dispuestos a llegar a hasta una condición prácticamente totalitaria de cierre de espacios de sociedad civil”.
Además, considera que el cierre del INCAE como institución de gran reconocimiento en la región centroamericana es una señal muy negativa.
“No, solo es un golpe que cae en Nicaragua, es para toda la región. Un centro que trabajaba con una lógica no solo regional sino internacional y obviamente esto va a tener repercusión porque creo quienes pasaron por INCAE terminan teniendo una acción de solidaridad y de reacción de apoyo a la entidad en la que con la que estuvieron vinculados”.
Cierre de INCAE impacta en inversiones
El analista político y economista Enrique Sáenz señala que la toma del INCAE repercute en el ambiente de inversiones en Nicaragua debido a que provoca más desempleo y desplazamiento forzado.
“Está enviando un mensaje letal que repercute en el ambiente inversionista del país, si ya los nicaragüenses están sufriendo desempleo, subempleo, bajos salarios que son los que provocan los desplazamientos forzados por falta de confianza en los inversionista, pues esto lo que hace es reforzar, ese ambiente negativo que al final parece ser una política deliberada expulsar nicaragüenses al exterior para que eso se traduzca en remesas una acción de carácter satánico se puede decir provocar sufrimiento en la gente para que busque otro horizonte”, señaló.
El cierre de INCAE se suma a las más de 30 casas de estudios superiores canceladas por el régimen en Nicaragua.
"Apetito por adueñarse de lo ajeno"
Por su parte, el excarcelado político Félix Maradiaga señaló que el robo del campus del INCAE es parte de la estrategia de los regímenes totalitarios que buscan ejercer un control absoluto sobre la educación.
También señala que existe un "apetito por adueñarse de lo ajeno, que es algo que ha caracterizado al FSLN".
En este sentido se solidarizó con los graduados de los diversos programas de INCAE y con toda la familia de exalumnos, directivos, profesores y colaboradores.
"Al cerrar instituciones educativas como INCAE, el régimen de Ortega-Murillo oscurece el horizonte de oportunidades para las generaciones venideras y condena al país a un estancamiento intelectual y económico. La defensa de la propiedad privada y la educación es una lucha por la libertad y el progreso que no debe cesar hasta que se restaure la libertad en Nicaragua".