Sacerdote nicaragüense exiliado, Fernando Téllez, ejercerá su apostolado en Costa Rica
El sacerdote nicaragüense Fernando Téllez Báez, de la Arquidiócesis de Managua, quién se exilió en medio de la ola de arrestos de religiosos y de las tensiones entre el régimen de Daniel Ortega y la Iglesia católica en Nicaragua, ahora servirá en la comunidad parroquial San Rafael Arcángel en Heredia, Costa Rica.
En la página oficial de facebook de la parroquia San Rafael Arcángel, informaron que el religioso se incorporaba a esa comunidad “Este año nos va acompañar en la parroquia el Padre Fernando Ramón Téllez Báez. Él es uno de los Sacerdotes exiliados por las persecuciones del régimen de Nicaragua”, indica la publicación.
Además de agregar una fotografía del sacerdote, informaron que el religioso de 63 años, había sido ordenado hace 31 años y que en Nicaragua servía en la Arquidiócesis de Managua.
“Son varios los sacerdotes exiliados por el régimen nicaragüense que estarán sirviendo en Costa Rica, hasta que puedan regresar a su país. Le damos la bienvenida y Oramos por Nicaragua”, reza la publicación de facebook de la parroquia San Rafael Arcángel.
Leer más: Padre Marcos Somarriba califica de “lacras” a los gobiernos abusivos
Téllez es uno de los sacerdotes que se encuentra exiliado en Costa Rica ante la persecución del régimen de Daniel Ortega en contra de la Iglesia Católica.
Era párroco en Nuestra Señora de las Américas y huyó de Nicaragua luego de que agentes de la Policía Nacional amenazaran con arrestarlo informó la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, autora del estudio 'Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?.
Decenas de sacerdotes en diferentes partes del mundo se enfrentan a las dificultades propias del exilio, el dolor de haber dejado sus familias y comunidades parroquiales y ante los retos de adaptarse a un nuevo país.
Esta misma semana se conoció que el sacerdote nicaragüense Uriel Vallejos fue nombrado párroco residente en la parroquia San Isidro Labrador en Coronado, también en Costa Rica.
Vallejos era párroco de la Divina Misericordia de Sébaco, de la Diócesis de Matagalpa, en Nicaragua.
Las relaciones del régimen de Ortega y la Iglesia católica viven momentos de gran tensión, marcadas por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, la prohibición de actividades religiosas y la suspensión de relaciones diplomáticas con el Vaticano.
Nicaragua atraviesa una crisis desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las elecciones de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión.