Familiares exigen pena máxima para TikToker "La Rubia" por muerte de matrimonio
La Fiscalía y los familiares de los fallecidos Jaiminton Alberto Pérez Hernández y Ana Cecilia Echaverry Siézar, solicitaron la pena máxima para el creador de contenido Carlos Humberto Sandoval Molina, conocido como “La Rubia” en TikTok, reportó Despacho 505.
El trágico accidente ocurrió la madrugada del 25 de agosto en el departamento de Rivas, cuando Sandoval Molina impactó por la parte trasera a la motocicleta en la que viajaba el matrimonio. Las investigaciones policiales indicaron que “La Rubia” conducía bajo los efectos del alcohol y alta velocidad.
El TikToker enfrenta cargos por homicidio a título de dolo eventual en perjuicio de Jaiminton y Ana. En la continuación del juicio, que se llevó a cabo el pasado miércoles, la Fiscalía, a pedido de los familiares de las víctimas, rechazó cualquier acuerdo de mediación que permitiera la libertad de Sandoval Molinafamiliares de las víctimas, rechazó cualquier acuerdo de mediación que permitiera la libertad de Sandoval Molina.
El Código Penal de Nicaragua establece que por cada persona fallecida en circunstancias como estas, se puede imponer una pena de 15 años de prisión, lo que podría llevar a una condena total de 30 años para “La Rubia”.
Orlando Dávila, abogado acusador, comentó “La pérdida de este matrimonio causó daños irreversibles a toda una familia, por lo que pedimos la pena máxima. Estamos satisfechos con el avance del proceso”.
El juez Mario Barberena ha programado la continuación del juicio para el 1 de noviembre. Según familiares, el matrimonio se dirigía a la casa de un familiar para preparar un cerdo para una celebración familiar cuando ocurrió el fatal accidente. Desde el primer momento, han rechazado cualquier mediación y han solicitado la máxima pena.
Tras el accidente, Sandoval Molina realizó una transmisión en TikTok para referirse a la tragediaSandoval Molina realizó una transmisión en TikTok para referirse a la tragedia que lo mantiene en prisión. Ana Echaverry era una profesora recién jubilada del Colegio Miguel Larreynaga, mientras que su esposo Jaiminton era un reconocido tapicero en su barrio.