No todos los nicaragüenses se quedan en Costa Rica, algunos solo quieren respirar
El pasado sábado 18 de agosto se vivió la que se considera la expresión más xenofóbica de los últimos años en Costa Rica.
Alrededor de 500 personas -con banderas ticas, camisetas de la selección e incluso con pintura en la cara- asistieron a este lamentable evento en el Parque La Merced.
Portando carteles que causaron un ambiente tenso, provocaron disturbios y eso obligó a la presencia de más de 30 policías en el lugar. La manifestación se mantuvo activa en el sitio por varias horas, los manifestantes incluso entonaron el himno nacional.
La mañana de este martes la presencia de vendedores y ciudadanos nicaragüenses en el Parque La Merced era casi inexistente. Sin embargo, CRHoy, compartió con el nicaragüense Francisco Ramírez, quien se encuentra en el país desde el 3 de julio luego de huir de la crisis en su país.
Ramírez explica que su plan no es quedarse en el país como una solución fija, sino esperar a que la delicada situación en la que se encuentra Nicaragua disminuya y pueda reunirse una vez más con su familia en su país natal.
Comentó sobre el dolor que sintió al ver una manifestación como la del sábado y aseguró que ellos acuden a Costa Rica por ser un país hermano. Ramírez explicó que él no viene a hacer vida social, sino que a ellos los sacaron de su pueblo natal y necesita agarrar oxígeno.
Asegura que le da tristeza que la imagen de los costarricenses se manche por este tipo de actividades.