Opinion: Expropiador, expropiado por Edmundo Jarquin
Hasta ahora, y enfatizo “hasta ahora”, el régimen de Ortega nos ha expropiado de la democracia que recién habíamos empezado a construir, con sus imperfecciones, entre todos los nicaragüenses, y no solamente entre los antisandinistas. Los hostigamientos y asedios a que ha sometido a algunos presos políticos excarcelados, solamente demuestra que su régimen únicamente sobrevive en base a la represión.
Así como Ortega terminó expropiado de las principales consignas de la revolución sandinista, entre ellas, y muy notablemente “el pueblo, unido, jamás será vencido”, y, “¡qué se rinda tu madre!”, es muy discutible que conserve la base política que hasta hoy tuvo. Precisamente, los testimonios de los presos políticos recientemente excarcelados dan cuenta de la insatisfacción de miembros de la policía, y de los propios carceleros, con la represión a que los tienen sometidos los mandos orteguistas.
Las cuentas son sencillas. Con Ortega y su familia, y sus pretensiones dinásticas, la situación económica no mejorará. La reciente misión del Fondo Monetario Internacional (FMI), que terminó hace menos de dos meses, lo dijo entrelíneas en su declaración final, y debe habérselo comunicado más claramente a sus interlocutores en el gobierno: si no hay solución a la crisis política, la situación económica empeorará. La gran pregunta que todos los nicaragüenses se hacen, y desde luego la hacen los propios miembros del FSLN, y los miembros del ejército y la policía, es si acaso con la continuación de Ortega y su familia en el gobierno habrá esa solución política, que todos sabemos es prerrequisito de solución a la crisis económica.
Y mientras no haya solución a la crisis económica, todos los nicaragüenses, sandinistas y antisandinistas, estaremos afectados. Las propias empresas del instituto de previsión social del ejército y la policía están siendo afectadas, y el alivio que pueda darles el gobierno será temporal, si es que hay algún alivio.
¿Y qué decir del tercio de la población que, números más o números menos, guarda relación con el FSLN? Entre ellos hay trabajadores del campo y la ciudad, afectados por la recesión económica, pero también pequeños, medianos y grandes empresarios, que también enfrentan la crisis. Ellos también saben que con Ortega no hay solución.
Entonces, ¿quién gana con Ortega y su familia? Nadie, ni sandinistas ni antisandinistas, y esto lo sabemos por encima de la polarización, que solamente a Ortega conviene.