Daniel Ortega desprecia a la nación al olvidar banda presidencial, dice sociólogo
El olvido de la banda presidencial de parte del dictador Daniel Ortega, durante el final su discurso en la investidura de su ilegítima toma de posesión significa un desprecio total a la nación, dijo a 100% NOTICIAS un sociólogo, quien pidió el anonimato por temor a represalias del régimen.
Al final de su discurso, el dictador Daniel Ortega bajó de la tarima junto al dictador cubano Miguel Díaz Canel, olvidando la banda presidencial sobre una mesa, pero esta fue entregada a Rosario Murillo por el mandatario de la isla caribeña.
Lea: Excomisionada Sophia Lacayo se reúne con Amnistía Internacional sobre presos políticos de Nicaragua
“Una de las lecturas que se le puede hacer al tema de que Ortega se retiró la banda presidencial y la dejó olvidada, significa que su conciencia no está tranquila por todo lo que ha hecho contra la ciudadanía y porque sabe que está llevando a la nación sobre un abismo sin salida”, explicó el sociólogo.
“El hecho de que Daniel haya olvidado la banda presidencial tiene dos lecturas. Él manda mensajes claros y concretos. La primera interpretación significa un desprecio a la nación porque la banda presidencial está representada y simbolizada en la bandera de Nicaragua”, añadió.
El sociólogo también explicó que la banda presidencial tiene que ser resguardada por el personal de protocolo que asiste al mandatario porque “eso no es cualquier trapo, sino que representa a la bandera nacional”, agregó el experto.
Lea más: Invitado de Daniel Ortega tiene orden de captura de Interpol
De acuerdo con el sociólogo, con “el olvido de la banda presidencial” de parte del dictador, Ortega manda otro mensaje.
“Otro de los mensajes que Daniel Ortega manda es que él puede hacer lo que quiera. La banda presidencial no se manipula de esa manera”, expresó el sociólogo.
Cuando el dictador cubano entregó la banda presidencial a Rosario Murillo, ésta hizo un gesto de asombro en señal de rechazo a la actitud de Ortega.
¿Perdidos en su realidad?
El sociólogo también analizó los gestos de la vicedictadora Rosario Murillo, quien durante la ceremonia lució nerviosa y alterada, afirmando que las sanciones impuestas ayer en conjunto con Estados Unidos y la Unión Europea a altos mandos militares, funcionarios y a dos hijos de la pareja dictatorial, significan que están siendo “golpeados”.
Lea también: Borrón y cuentas nuevas es apostar a la impunidad, dicen defensores nicaragüenses
“Aunque Daniel Ortega y Rosario Murillo estaban juntos, la actitud de ellos era distante. Eso significa que ambos están perdidos en una realidad que no quieren reconocer”, señaló.
Cuando Daniel Ortega brindaba su discurso, Luciana Ortega Murillo, hija de la pareja dictatorial tuvo que pasarle una botella con agua a su madre para poder tranquilizarla, posteriormente uno de los meseros, tuvo que pasar una taza de té, para tranquilizar a la vicedictadora.