Miguel Mora recibe visita de su hijo Miguelito en El Chipote tras 59 días de huelga de hambre
En medio de risas, llantos, besos, abrazos, cantos de alabanzas a Dios, así fue el reencuentro entre el periodista Miguel Mora y su hijo Miguelito, cuya visita fue autorizada para este sábado 20 de agosto, día en que Miguel cumplió 59 días en huelga de hambre en demanda para ver a su hijo.
"Cuando entramos por la puerta, Miguel recibió a miguelito con un gran grito ¡Gloria a Dios!miguelito lo logramos, la Gloria sea para Dios y Miguelito dijo ¡"papi"! y se abrazaron, cantaron y oraron" relató Verónica Chávez, esposa de Miguel Mora.
Agregó que "Miguelito y su papá, cantaron alanbanzas juntos, se abrazaron, se besaron. Cantaron juntos: "Dios ha sido bueno; Levanto mis manos; Dios está aquí; el himno de la victoria; el himno Alaba a Dios".
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La familia Mora Chávez dice "la Gloria es para Dios por el milagro que Dios hizo despues de 1 año y 2 meses de permitir el reencuentro entre miguelito y su papá" aseguró Chávez.
Para Miguel, esta visita representó el mejor regalo de su vida hoy día de su cumpleaños 57. Su hijo Miguelito iba feliz de camino a El Chipote para ese tan esperado reencuentro.
"Mañana (domingo) hará un ayuno de Acción y Gracias por la bendición recibida y espera que ese derecho quede permanente tanto para él como para los demás presos políticos que no han visto a sus hijos. Para que no tengan que enfrentar una huelga de hambre en demanda de ver a sus hijos" dijo Chávez a 100% Noticias.
La visita fue programada de 10 de la mañana a 12 del medio día. Antes de ingresar Miguelito no dejaba de decir "Gracias a Dios"; "Gloria a Dios"; y exclamaba "¡Aleluya!".
Verónica Chávez, esposa de Mora, tuvo que preparar horas antes a Miguelito, para la visita a su padre.
"Miguelito le preguntó a su papá ¿qué estás haciendo?" y Miguel le dijo "estoy aquí construyendo una gran casa con piedras firmes y sólidas, estoy trabajando miguelito para Nicaragua" y miguelito respondió "chocho".
En la conversación con su hijo, Mora le preguntó de sus terapias, le dijo que "estaba feliz por verlo recuperado por la covid".
Producto de la huelga de hambre Mora "está sumamente delgado, pero está más fortalecido que nunca en la fe con el Señor porque Dios es bueno y Dios ha sido maravillo con esa fe" insistió Chávez.
Miguel Mora continúa demandando su libertad y el derecho de tener una biblia.
La despedida de la visita
Miguelito Mora Chávez es un niño con discapacidad motora y recibe terapia desde la niñez. Una de las preocupaciones de Verónica es como decirle que tenían que irse y dejar a su papá y sin saber cuanto tiempo más pasará sin que ambos se vean.
Es por eso que previo a la visita Verónica le anunció a Miguelito que harían un paseo después de ver a su papá que incluía ir a ver a su abuelita chilo y asistir a un cumpleaños de una primita.
"Y le dije que cuando esté con su papá le dijera que íbamos a ir a una piñata. Cuando estabamos en la visita a su papá el niño le dijo piñata, pues al final para despedirnos, le dije a él que le dijera a su papá que le diera permiso para ir a la piñata, asi fue como nos despedimos", contó Chávez.
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"Miguelito está feliz, no ha dejado de sonreir no ha parado, en todo el camino que ibamos al chipote y así fue cuando regresamos" reafirmó Verónica.